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Reportaje:La crisis del automóvil

22.000 empleados del automóvil se van a casa por falta de trabajo

El sector extingue 1.614 contratos en cuatro meses y pide ayudas directas

Los fabricantes y los vendedores de coches han acudido finalmente, con cifra récord de marcas acompañada de subvenciones, al Salón Internacional del Automóvil de Barcelona. Pero, a cambio, han convertido el popular evento de la Fira en plataforma y altavoz de su travesía en el desierto, con caídas de ventas superiores al 45%, resumida por el presidente de la patronal de concesionarios, Faconauto, Antonio Romero-Haupold, en tres palabras: "Es una hecatombe". Se venden menos coches, se fabrican menos y las plantas necesitan menos manos. En los primeros cuatro meses de 2009, 1.614 personas han perdido su empleo en la industria del automóvil catalana, que ante la falta de carga de trabajo ha mandado a casa, con suspensiones temporales de contratos, a otras 22.332.

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Son los datos que han recopilado CC OO y UGT de Cataluña entre el 1 de enero y finales de abril, y superan ya de largo la cifra de víctimas de despidos colectivos registrada en todo 2008 (22 expedientes que afectaron a 853 trabajadores). Y se acercan a la cuantía de afectados por suspensiones temporales de empleo (128 expedientes, para 28.808 personas).

¿Hasta cuándo va a continuar esta sangría? "Yo creo que ya se ha empezado a tocar fondo", apunta José Antonio Pasadas, secretario de Política Sindical de UGT de Cataluña. "La crisis llegó casi de golpe, después de registrar niveles de producción y de venta espectaculares e irreales, y las empresas no sabían cuánto iba a durar esta situación ni con qué intensidad, de modo que se quedaron cortos con las primeras suspensiones temporales de empleo, que se hicieron por tres o cuatro meses", añade. Las mismas empresas aplican ahora nuevos expedientes temporales, por nueve meses o incluso un año. De modo que, según Pasadas, "las cifras de trabajadores afectados no van a ir mucho más allá".

La apreciación de Manuel Toscano, responsable de automoción de Federación de Industria de CC OO de Cataluña, no es muy distinta. "La cifra puede aumentar, pero creo que hemos tocado fondo". Las plantas catalanas exportan ocho de cada 10 coches que producen, y los planes de estímulo en distintos países europeos se empiezan a notar, en positivo. La producción en enero arrojaba una caída interanual del 50%; en febrero, del 43%. Y en marzo, ya sólo del 4,8%. En cuanto a las exportaciones, que caían en la misma proporción, registraron una subida ligera, del 1,4%, en marzo.

Toscano se inquieta, más que por mañana, por pasado mañana. Los dos grupos tractores de la industria en Cataluña, Seat y Nissan, han garantizado el Audi Q3, una furgoneta que debía hacerse en Marruecos y también otro modelo por definir. Son buenas noticias, pero, ¿hay futuro después?

"La adjudicación de estos modelos sólo nos deben hacer perseverar en el trabajo para que vengan otros modelos a partir de 2011", subraya el secretario de Industria de la Generalitat, Antoni Soy, quien subraya la importancia del automóvil para Cataluña y quien sólo se atreve a asegurar que existirá industria dentro de 15 o 20 años "si hacemos todos los deberes y la transformamos para hacerla más competitiva".

Este sector, termómetro infalible de la economía y de los humores del consumo, se lleva nada menos que el 8% del producto interior bruto (PIB) catalán. Pero adolece de una debilidad tremenda: el empleo masivo lo encarnan empresas gigante cuyos centros de decisión no están aquí. La industria de componentes (y la que fabrica las piezas de que constan, a su vez, los componentes) es un cajón de sastre de multinacionales como Delphi, Lear, Frape Behr, Bosch, que coexisten con conglomerados autóctonos como Ficosa o Estampaciones Sabadell. "Es una realidad, sí, es una debilidad", admite Soy. De ahí la importancia de que la Generalitat, las empresas y los sindicatos trabajen en colaboración para crear condiciones que hagan más competitivo el entorno, para que las empresas apuesten por otros modelos. "Y eso incluye desde la logística hasta la formación, pasando por las infraestructuras energéticas o la innovación", subraya.

El plan integral del automóvil del Ministerio de Industria y el Programa de Apoyo a la Automoción de la Generalitat intentan abordar el largo plazo, aunque lo sindicatos creen que llegan alto tarde.

Pero las empresas tienen hambre hoy. El presidente de los fabricantes de Anfac, Francisco Javier García Sanz, ha pedido unplan a tres bandas (Gobierno central, autonomías y fabricantes) para estimular la demanda, para vender coches. La Federación Catalana de Vendedores de Vehículos de Motor (Fecavem) ha reclamado un plan Prever catalán, como el de otras autonomías. La Generalitat cree que la concesión de ayudas directas corresponde al Estado, y, de hecho, el presidente José Montilla replicó el viernes que la petición debía dirigirse "a otra ventanilla". No está claro qué hará el Ejecutivo central. "Si no hace nada, tendremos que estudiarlo", admite Antoni Soy.

El primer día del Salón del Automóvil registró ya una gran presencia de ciudadanos, como se aprecia en la fotografía superior, con un pabellón de Seat a rebosar, y en la fotografía de abajo, en la que un grupo de jóvenes se interesa por las condiciones y cualidades de un modelo de la casa japonesa Honda.
El primer día del Salón del Automóvil registró ya una gran presencia de ciudadanos, como se aprecia en la fotografía superior, con un pabellón de Seat a rebosar, y en la fotografía de abajo, en la que un grupo de jóvenes se interesa por las condiciones y cualidades de un modelo de la casa japonesa Honda.MARCEL·LÍ SÀENZ

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