La crisis dispara hasta 86.000 el número de parados sin prestación

La cara más amarga de la crisis es el paro. En Cataluña roza ya el medio millón de personas, el 70% más que hace un año. El drama empeora cuando, además de no tener trabajo, el desempleado se queda sin ingresos porque se le ha agotado la prestación por desempleo y el subsidio posterior. Y esta cifra también va en aumento. El número de desempleados sin ayudas casi se ha duplicado en el último año en Cataluña. En febrero -las cifras oficiales, del Ministerio de Trabajo, tienen un mes de decalaje-, los que no cobran nada llegaron a las 86.187 personas, frente a las 41.189 de diciembre de 2007 o a las 47.097 de enero de 2008.

Es cierto que el número de parados también se ha duplicado en este periodo, al pasar de las casi 283.000 personas de principios del año pasado al medio millón actual, pero ha crecido más la proporción de desempleados sin ingresos. Hace un año, este colectivo representaba el 18%, hoy son 22 de cada 100.

Los sindicatos temen que la cifra vaya en aumento, por lo que exigen al Gobierno catalán que ponga en marcha una renta garantizada de ciudadanía, de acuerdo con el artículo 24 del Estatuto. Pero el Ejecutivo de José Montilla, que está sin blanca por la falta de un nuevo modelo de financiación, enfría las expectativas y matiza el pesimismo de las centrales sindicales.

"Deben tenerse en cuenta por lo menos dos factores", explica un alto cargo de la Generalitat. "Muchas de las personas que constan como paradas, antes ya no trabajaban; se han apuntado ahora, lo que hace que la situación sea menos dramática". En febrero, fueron 20.600. "En segundo lugar, los nuevos parados proceden mayoritariamente de la industria, tienen más días cotizados y, por consiguiente, pueden encontrar trabajo antes de agotar la prestación". La Generalitat confía en que la proporción de parados sin ingresos se estabilice.

Pero la merma de ingresos ha llevado a muchas familias a solicitar la renta mínima de inserción (RMI), el antiguo PIRMI, que la Generalitat concede a personas o familias sin medios, mientras se preparan para la inserción o reinserción sociolaboral. El pasado mes de febrero, 14.540 familias se beneficiaban de la ayuda, el 15% más que un año antes. Para este año, el importe del RMI es de 410 euros mensuales, 10 más que en 2008.