"No quiero que mi familia se preocupe"
El único apoyo de Tarik en España es la renta mínima que cobra desde este mes. A su familia, que dejó en Marruecos hace nueve años, le ha contado que hace seis meses que le echaron del trabajo. Pero no que sigue un tratamiento por su ludopatía. Repite algo habitual entre quienes viven situaciones extremas: "No quiero preocuparles".
El tratamiento es una de las condiciones para recibir la renta. Hace dos meses se le acabó la prestación del paro, que se aseguró cuando trampeaba de trabajo en trabajo en tiempos de bonanza.
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