Sin receta conocida
Es fácil prometer una rebaja de impuestos, una economía solidaria, nuevos hospitales o empleo para todos los licenciados. El papel lo aguanta todo. Los partidos definen sus programas electorales como su contrato con la sociedad. La realidad es diferente. Por un lado, hay pocos ciudadanos que dediquen parte de su tiempo a comparar los programas. Por otro, no existe ninguna obligación de cumplimiento. En los sistemas parlamentarios representativos no figura el mandato. Los grupos parlamentarios tiene libertad de acción y los ciudadanos les pueden castigar o premiar en los siguientes comicios. Esta premisa hace fácil llenar los programas de ideas para salir de la crisis. La realidad es que hoy por hoy nadie conoce el camino.
La innovación se ha convertido en la esperanza de la clase política
El presidente de EE UU, Barak Hussein Obama, se presentaba como la esperanza económica. Sin embargo, sus medidas, apoyadas por buena parte de la ortodoxia académica, no han sido bien acogidas por los mercados. ¿Es que las cosas no se hacen bien? El debate sería eterno y el resultado no se sabrá hasta dentro de varios años. La realidad es que la crisis de origen financiero, en las llamadas hipotecas basura en EE UU, permanece viva. Las sociedad desarrolladas no se mueven sin un sistema financiero bien engrasado. La economía real, la de cada ciudadano y empresa, permanece estancada, en retroceso. Palabros como demanda agregada, que no es más que el consumo, están muertos y la causa sigue siendo el sistema fianciero internacional.
Con estas premisas es difícil encontrar una receta en Euskadi para ser mejores que el resto y sobrevivir a la crisis. Los trabajadores de Sidenor, Mercedes, Cegasa o las muchas pequeñas empresas que viven de ellas, sólo saben que su futuro cada día es más incierto. Euskadi no tiene la llave para que en el conjunto del mundo se vendan más automóviles, para que la empresas que los fabrican necesiten más máquina herramienta o para que se hagan más casas y Fagor pueda seguir colocando sus electromésticos en el mercado. No existe una receta mágica ni siquiera conocida. Se puede dar formación, ayudar a los desmplados, facilitar el crédito a las empresas,... se puede capear el temporal para sobrevivir hasta que llegue el buen tiempo.
En la tormenta general los políticos vascos se agarran a la esperanza de la innovación. En todos los discursos se destaca que será clave en el futuro. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, incluso habla de incorporarlo al ADN vasco, dado que ya no está de moda hablar del RH. Los socialistas pasean a su ministra de Ciencia y Tecnología, Cristina Garmendia. Hay que vender esperanza y la innovación es el clavo al que se agarra la política. Probablemente sea una buena percha, pero nadie lo sabe, porque nadie sabe ni la duración ni lo que va a pasar con nuestro tejido económico mañana. Nadie sabe si la crisis va a pasar como una dura recesión o si el mundo caerá en una dura depresión como la de 1929 o en una estanflacción (decrecimiento del PIB con caída de los precios) como viene sucediendo en Japón.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Elecciones Vascas 2009
- VIII Legislatura País Vasco
- Debates electorales
- Consejerías autonómicas
- Comunidades autónomas
- Financiación autonómica
- Actos electorales
- Campañas electorales
- Gobierno Vasco
- Parlamentos autonómicos
- Gobierno autonómico
- Política autonómica
- Administración autonómica
- Elecciones autonómicas
- Parlamento
- País Vasco
- Elecciones
- España
- Finanzas públicas
- Política laboral
- Trabajo
- Administración pública
- Finanzas
- Política