El BCE deja los tipos de interés en el 2% y apunta a un nuevo recorte en marzo

La industria alemana cae a toda velocidad; la española y la del resto de Europa están peor aún. Los tipos rozan el 0% en EE UU y Japón, y Reino Unido los bajó ayer al 1%, el menor nivel en más de 300 años de historia. Pero ni la rebaja acelerada del precio del dinero en las grandes potencias ni la dramática crisis económica y financiera consiguen cambiar el guión del Banco Central Europeo (BCE). Su presidente, Jean-Claude, aseguró hace un mes que no habría nuevos recortes hasta marzo. Y ni la recesión, ni el drástico aumento del paro en Europa, ni la crisis de crédito ni la nueva oleada de problemas en la banca han modificado esos planes.

El Consejo de Gobierno del BCE, reunido en Fráncfort, cumplió las previsiones y dejó los tipos para la eurozona inalterados en el 2%, muy por encima de las tasas de las grandes áreas económicas del mundo. Trichet mantuvo el rumbo trazado en la rueda de prensa de enero y, como hace un mes, dejó entrever sus intenciones de bajarlos dentro de cuatro semanas.

Trichet reconoce la "extraordinaria inseguridad" de la economía global

La actual crisis económica y el "extraordinariamente alto grado de inseguridad" en la economía europea provocarán un nuevo recorte en marzo, hasta tasas nunca vistas en la zona euro. El 2% actual es, de momento, el mínimo histórico. Tras aplicar cuatro rebajas consecutivas desde el pasado octubre, la de ayer es, según los indicios dejados por Trichet, una mera pausa en la escalera descendente que dibuja la tabla de los tipos de interés marcados por el BCE desde octubre.

Las amenazas inflacionistas que acompañaron las subidas de tipos de los últimos años se han desvanecido. Ahora recorre Europa el fantasma de la caída persistente y generalizada de los precios. Por eso, numerosos expertos piden la inmediata bajada del precio del dinero para abaratar los costos de préstamos y para dinamizar el consumo. La amenaza no ha bastado en febrero, pero la máxima autoridad monetaria europea reconoció de nuevo que el 2% actual "no es la menor tasa de tipos que podamos imaginar".

Trichet es contrario a reducir los tipos al 0%, un nivel en el que la política monetaria pierde tracción, según la literatura económica. Pero el responsable del eurobanco abrió ayer la puerta a "otras posibles medidas, poco convencionales". El BCE, dijo, "está en otro universo que el de los demás bancos centrales". Al menos en lo que respecta a los tipos: el eurobanco tiene, de largo, el precio del dinero más elevado entre los grandes bancos centrales.

Sobre todo después de la decisión de ayer en Reino Unido. El Banco de Inglaterra recortó los tipos hasta el 1%, hasta el nivel más bajo desde su creación, en 1693. El recorte se explica no sólo por el deterioro de la situación económica, sino por el temor del banco central a que la inflación se desplome. La de ayer es la quinta bajada mensual consecutiva de tipos, que estaban al 5% en septiembre. Otros bancos centrales como el checo o el surafricano redujeron también tipos ayer.

En Londres, el recorte provocó reacciones encontradas. Aunque recibió un visto bueno general y el apoyo de la patronal CBI, la asociación de sociedades hipotecarias BSA estima que el recorte penaliza a los ahorradores y que éstos pueden acabar retirando sus fondos porque las remuneraciones están ya al borde de cero, lo que haría aún más difícil el acceso a dinero líquido y la concesión de hipotecas. Los pequeños empresarios afirman que los tipos ya están lo bastante bajos y se quejan de que lo que necesitan es acceder a nuevos créditos.

El Banco de Inglaterra admitió que la economía global "está al borde de una caída severa y sincronizada". El comité monetario del banco emisor británico subrayó también que aunque los mecanismos de transmisión de la política monetaria se han deteriorado, "los anteriores recortes de tipos tendrán en su momento un impacto significativo".