La CEV estima una caída del 1,2% del PIB para 2008

La economía de la Comunidad Valenciana creció durante 2007 un 3,7%, una décima por debajo de la media nacional, pero las estimaciones que maneja la Confederación Empresarial Valenciana (CEV) apuntan hacia una reducción, ya que la horquilla de crecimiento en términos de PIB oscila entre el 2,2% y el 2,5%. Es un resultado superior a la media prevista en España, pero algo más de un punto por debajo del anterior resultado.

El Informe de coyuntura y perspectivas económicas correspondiente al mes de abril, que la organización presentó ayer a la junta directiva, advierte de que esa moderación en el ritmo de crecimiento se reflejará en prácticamente todos los sectores productivos, excepto en el de la manufactura, que recuperará fuelle en los mercados interior y exterior. Por su parte, la construcción "seguirá su senda descendente" y también los servicios de mercado, excepto los relacionados con el turismo, padecerán una "suave desaceleración".

En el análisis de los datos de contabilidad regional referidos a 2007, el estudio reseña su sorpresa a la baja de los datos agregados de los sectores primarios, de la energía y el sector industrial. En ese sentido, la agricultura, ganadería y pesca cayó un 0,3 frente al aumento del 3,8 de la media nacional; la energía descendió 1,4 puntos, mientras que la media se situó en un punto positivo; y la industria solo experimentó un ascenso del 0,2, frente al 3,1 de la media.

Por el contrario, los sectores de la construcción y servicios sorprenden al alza, con tasas de crecimiento superiores a la media nacional y a las previsiones realizadas por los agentes económicos. Así, la construcción cerró 2007 con 5,1 puntos, frente a los 3,8 de la media, y los servicios alcanzaron los 4,6, unas décimas más que el promedio.

Con todo, y como aspecto positivo, el informe destaca que pese a que todos los indicadores confirman que la senda de la desaceleración iniciada en el verano de 2007 "es más intensa, generalizada y prolongada" que la que señalaban las previsiones, la economía parece haber iniciado "un proceso de crecimiento más equilibrado entre los sectores productivos", con un mayor peso de la inversión en los bienes de equipo y una menor contribución negativa del sector exterior.

El informe constata asimismo que el mayor ajuste del desempleo se está produciendo en la construcción y el sector inmobiliario.