Los residuos peligrosos aumentan un 75% y superan las 500.000 toneladas
El nuevo plan de Medio Ambiente prevé que en 2011 crezcan otro 15% más
La generación de residuos peligrosos en Euskadi se ha disparado hasta más de 500.000 toneladas anuales, casi el doble del objetivo marcado la década pasada de generar 290.000 toneladas. El Departamento de Medio Ambiente, que atribuye la subida al aumento de los materiales que se recogen y al mayor celo de las empresas en el tratamiento, ha elaborado el nuevo plan de gestión de estos desechos, en el que admite que seguirán creciendo. Para 2011, año hasta que se extiende el plan, espera un aumento de un 15%.
El proyecto, que está en fase de alegaciones hasta el 2 de mayo, señala que en 2004 (los últimos datos disponibles) se produjeron 510.000 toneladas, lo que "supone un incremento del 75,9%" sobre lo previsto en el anterior plan de residuos peligrosos (2003-2006). Éste preveía estabilizar la generación en 290.000 toneladas al año. Medio Ambiente explica el elevado aumento por la incorporación de más residuos y la mejora continua en su gestión, a lo que une "la creciente sensibilización ambiental de la sociedad", al gestionarse ahora desechos como pinturas, pilas, baterías y envases que van a los garbigunes. Incluye un cuarto factor, la incorporación de los llamados "residuos de fin de línea", procedentes del tratamiento de vertidos de aguas residuales o emisiones atmosféricas. El aumento de estos desechos es valorado como "muy positivo, ya que implica la reducción de la contaminación emitida" directamente al agua y la atmósfera.
Más de la mitad se exportan, pero no se contemplan plantas de almacenamiento
Para 2011, el plan de Medio Ambiente prevé la generación de casi 452.000 toneladas, sin contar los llamados desechos históricos (tierras contaminadas, residuos de amianto y aceitos y aparatos con PCB), que en 2004 suponían 123.000 toneladas. El departamento admite que se mantendría el llamado desacoplamiento negativo, es decir que el aumento de los residuos peligrosos irá por encima del crecimiento económico, otra de las previsiones fallidas del anterior plan. "La dinámica de generación de residuos peligrosos que se espera para 2011 sigue dependiendo fundamentalmente de la evolución de la industria siderometalúrgica", indica. Y es que la producción y transformación de metales (desde polvos de acería y escorias, hasta ácidos de decapado y taladrinas) supone más del 57% de los residuos peligrosos.
El plan destaca que la recuperación de los productos peligrosos ha aumentado desde el 28% hasta el 40% y estima que ahora pueda situarse ya en el 60%. Euskadi sigue exportando casi la mitad de estos residuos: en 2004 se enviaron fuera 235.000 toneladas, de las que 107.000 fueron a Andalucía, donde existe un depósito para estos productos. Al extranjero se trasladaron más de 8.600 toneladas, fundamentalmente residuos sanitarios y tierras contaminadas. "De manera general, la comunidad autónoma exporta a otras comunidades autónomas residuos destinados a su eliminación en depósitos de seguridad y deriva a otros Estados residuos peligrosos para su incineración, como sanitarios o con PCBs", dice el plan.
A principios de la década se barajó construir un depósito para estos desechos tóxicos en Euskadi, pero no llegó a realizarse porque ninguno de los municipios con los que se contactó aceptó acoger una instalación de este tipo. Ahora, como en el anterior plan, tampoco se contempla ninguna infraestructura específica. El documento habla únicamente de "iniciativas de gestión" para productos como fluorescentes y lámparas de descarga, y de autorizar "centros de agrupamiento" para pilas o desechos fitosanitarios y farmacéuticos.
Medio Ambiente se marca como objetivos estratégicos la prevención en la generación de residuos -apunta estudiar la implantación de dos cánones sobre la generación y vertido-, y alcanzar una recuperación del 65% de las toneladas generadas. Se contempla establecer por decreto los valores de referencia en la generación de residuos o modificar la normativa actual. La inversión del plan se estima en 10 millones de euros.
Los ecologistas aplauden la prevención
Ekologistak Martxan manifestó en enero su opinión en el Consejo Asesor, el foro de consulta de la consejería de Medio Ambiente. Recuerda que las previsiones del anterior plan "estaban minusvaloradas entre un 20% y un 30%" y que la cifra de 510.00 toneladas "es rotunda y no sorprendente" y "echa por tierra el concepto de desacoplamiento entre generación de residuos peligrosos y crecimiento económico". Considera que el nuevo proyecto propone "objetivos estratégicos sensatos, como prevenir la generación, alcanzar una tasa de valorización material [reciclaje] del 65% y facilitar un servicio eficiente de gestión a los productores".
Sin embargo, la asociación duda de que se alcancen los resultados previstos, "toda vez que el equipo de gestión es el mismo que ya ha fracasado" con anteriores planes. Los ecologistas cuestionan el funcionamiento de los centros de transferencia -los gestores autorizados que se hacen cargo de los residuos tóxicos antes de su tratamiento-, sobre los que el propio plan dice que "sigue resultando complicada" la determinación del destino final de los desechos que tratan. "Entonces, ¿por qué los autorizan con tanta alegría?", replican. Resaltan las 40.000 toneladas enviadas a Cantabria, que los ecologistas consideran "el vertedero del norte de España" por la falta de "control administrativo".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.