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Los efectos de la crisis

El frenazo en la construcción se ceba con la industria del ladrillo de Bailén

Una decena de empresas ha cerrado en el último año por la caída de la demanda

Ginés Donaire

Los datos hablan por sí solos. En el primer trimestre del año, entre enero y marzo, Bailén (Jaén) ha registrado 206 nuevos parados. La mayoría proceden del sector de la cerámica industrial (ladrilleras) y de la cerámica artística (alfarerías), pues no en vano este municipio de 18.583 habitantes es el principal núcleo productor del país, con 13.000 toneladas al día (el 18% del total nacional) de ladrillos, tejas y cerámica industrial.

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Sin embargo, la crisis de la construcción se está cebando con este sector, que genera el 60% de la riqueza de Bailén, con una facturación de 130 millones de euros al año. La demanda de ladrillos ha caído en torno a un 30% y la de cerámica artística, un 70%.

La crisis inmobiliaria no ha hecho más que agravar la precaria situación que el sector atraviesa en los últimos años debido a las inversiones millonarias que se ha visto obligado a afrontar para adaptar sus industrias a la normativa ambiental derivada del Protocolo de Kyoto.

Por si fuera poco, el sector de la cerámica artística se ha visto arrastrado también por los efectos de la crisis del sector inmobiliario y por la fuerte competencia que ejercen las importaciones de cerámica industrial desde China.

El resultado ha sido que en el último año han cerrado una decena de industrias locales. "Las más afectadas han sido las industrias más pequeñas que no han podido afrontar los elevados costes de la reconversión y, encima, les ha golpeado la crisis de la construcción puesto que la cerámica industrial se considera un objeto de lujo y ha caído la demanda", comenta Juan Soriano, gerente de la Asociación de Alfareros, un sector que cuenta con 70 centros de trabajo frente a las 40 industrias ladrilleras que operan en el municipio.

Pero Soriano se muestra aún más pesimista sobre el futuro más inmediato: "Lo peor está por venir, pues calculamos que la crisis se puede agravar en un año y muchas industrias no podrán subsistir".

Las industrias han tenido que afrontar inversiones medias de unos 180.000 euros para adaptarse al plan de calidad del aire, pero para muchos pequeños talleres familiares esa cantidad supone el beneficio de tres años.

El alcalde de Bailén, el independiente Bartolomé Serrano, indica que el Ayuntamiento ha promovido la creación de una Mesa por el Empleo, ante la inquietud que está provocando los niveles de desempleo (un 22,4% más con relación a enero) en un sector acostumbrado a tener pleno empleo y tirar de la economía local.

De momento, son varias las empresas que han recurrido a realizar paros técnicos de carácter temporal para contrarrestar la caída de la demanda. "Son paros de hasta 45 días de duración para acomodar su producción a la demanda", comenta Juan Santamaría, concejal de Empleo de Bailén.

"La desaceleración que se está sufriendo se refleja de manera clara en una disminución en la demanda de ladrillos, lo que ha provocado una acumulación de stocks muy importante", subraya José Alcalá, presidente de la Asociación de Ceramistas de Bailén, que no descarta que en breve se produzcan expedientes de regulación de empleo entre las industrias menos competitivas.

Desde la asociación se indica que el sector se ha visto obligado a acometer importantes inversiones en equipos de filtrado de humos, de captación de partículas, acondicionamiento de patios y otras medidas. "Aunque ha habido ayuda de la administración autonómica han sido inversiones muy cuantiosas que además no tienen ningún tipo de efecto en cuanto a incremento de producción, representando un nuevo costo que añadir a los habituales, sobre todo el energético, que con las últimas y continuas subidas está suponiendo unos aumentos en los costes importantísimos", precisa el presidente de los ceramistas.

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