Madrid conocía desde 2006 los problemas de la psicóloga del 'caso Alovera'

La Consejería de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid sabía desde finales de 2006 que numerosas mujeres estaban denunciando problemas graves con Isabel Tagle, psicóloga de los juzgados de Coslada y Torrejón de Ardoz. Lo sabían por varias fuentes: el Colegio de Psicólogos de Madrid y también por dos ayuntamientos, San Fernando de Henares y Coslada, que habían recibido numerosas quejas de afectadas. La única medida que tomó el Gobierno regional fue una amonestación verbal a la psicóloga, en otoño de 2007. Tagle tuvo después una trágica participación en el caso del doble crimen machista de Alovera.

La psicóloga había examinado a la víctima, Sylvina Bassani, a su entonces marido, Javier Lacasa, y al hijo de ambos. Obviando un intento de suicidio y la declaración del imputado reconociendo haber tirado una televisión al suelo después de enfurecerse porque Sylvina iba a hacer un viaje, opinó que en esa familia no había malos tratos y que era ella la que tenía problemas. Así lo determinó en marzo de 2007. Un año después, el 10 de abril, la mujer moría junto a su compañero, ambos abatidos a tiros por su ex marido delante de su hijo de cuatro años.

Trato desconsiderado

Muchas de las mujeres atendidas por Tagle en los últimos años han presentado quejas ante los centros de la mujer de Coslada y San Fernando, por trato desconsiderado y por el tipo de informes que elaboraba, todos muy parecidos, según las mujeres, y recomendando a casi todas que siguieran "tratamiento psicológico" para superar sus conflictos de pareja. Como en el caso de Sylvina. Ante la reiteración de las quejas, los municipios enviaron un escrito a varias instituciones, entre ellas, la Consejería de Justicia, que sólo la sancionó con una amonestación verbal. Después del asesinato de Bassani ha abierto un expediente informativo.

Una de las afectadas ha sido I. B., peritada por Tagle en agosto de 2005. Cometió el error de contarle que había sido violada a los 14 años. Esta información fue utilizada en su contra. La psicóloga decidió que la mujer odiaba a los hombres, por lo que era discutible que pudiera hacerse cargo de sus hijos. "Y no fue sólo esto", recuerda la mujer. "Me sentí juzgada desde el primer momento. Esta psicóloga tiene un problema grave de misoginia y somos muchas las que la hemos sufrido".