Ganaderos españoles encargan clones de sus mejores toros de lidia en EE UU
Una empresa de Tejas comienza en tres semanas la réplica del semental 'Alcalde'
La clonación ha llegado a la lidia. El ganadero Victoriano del Río comenzará en tres semanas el proceso para hacer una réplica de Alcalde, un semental de 16 años que ha llevado a la ganadería a ser la preferida de los matadores. Será clonado en Tejas por la empresa estadounidense Viagen, líder en el sector -ha replicado más de 300 ejemplares-. La firma sostiene que está en negociaciones con "otros dos criadores de toros de lidia y dos de caballos portugueses para toreo con rejones".
La firma pionera del mundo dice que también replicará caballos de rejones
En la finca El Palomar, en las faldas de la sierra de Madrid, pastan tranquilos decenas de toros. Negros, altivos, enormes. Un cartel de Peligro. No pase. Reses bravas indica que, aunque parecen tranquilos, al otro lado de la tapia de piedra están los más bravos entre los toros bravos. Gracias a uno de ellos, en 2007 El Juli abrió por primera vez la Puerta Grande de Las Ventas. Ahora figuras como Cayetano Rivera Ordóñez o Enrique Ponce se los rifan.
"Alcalde es un caso único, un ejemplar que no tiene precio y que nadie podría comprar por todo el oro del mundo", explica Ricardo del Río, hijo de Victoriano. Alcalde, nacido en 1992 y de más de 600 kilos, fue tentado cuando tenía dos años en la finca El Palomar. "Como tenía casta, decidimos probarlo como semental y ha sido increíble", añade Del Río. Cada año ha aportado entre 30 y 40 crías a la ganadería, "en el 90% de los casos mejorando las características de la madre".
De Alcalde desciende Cantapájaros, al que El Juli cortó dos orejas en Las Ventas el 23 de mayo de 2007 y con el que rompió el maleficio que le impedía abrir la Puerta Grande en San Isidro.
Así que los 16 años de Alcalde, un anciano como semental, son un drama para la ganadería. El pasado noviembre, Victoriano del Río asistió al Congreso Mundial de Criadores de Toros de Lidia, que se celebró en Aguascalientes (México). Allí escuchó cómo José Córdoba, director de Viagen para América Latina y España, detallaba las posibilidades de clonar ganado. La empresa, como refleja un informe de la Administración de Alimentos y Fármacos de EE UU (la FDA), es pionera en clonación.
"Ya hemos entregado más de 300 clones, la mayoría bovino, y siete equinos. Y tenemos otros 28 en lista de espera para esta temporada, así como algunos porcinos", explica Córdoba por correo electrónico. Viagen ha reproducido ejemplares idénticos de sementales de vacuno, purasangres que ganan carreras, todos animales excepcionales. "Se trata de preservar y multiplicar animales que han demostrado tener una genética superior. Serán usados como reproductores y no para su sacrificio y consumo", continúa el director de Viagen. Clonar un toro cuesta unos 12.000 euros. Asumible para animales selectos. Un caballo, cuya técnica está menos lograda, 150.000 dólares.
A mediados de marzo, Córdoba viajará a las fincas de Victoriano en Guadalix de la Sierra (Madrid) para tomar muestras de tejido de Alcalde. Normalmente, basta un poco de piel. Los científicos toman un óvulo de una vaca y le extraen su núcleo (que contiene el material genético de la madre). Allí insertan el núcleo de una célula adulta del toro (con el material genético del animal que se quiere clonar). La célula resultante -el núcleo del padre dentro del óvulo de la madre- se estimula en el laboratorio y comienza a dividirse como si fuera un embrión. Después de unos días, los científicos lo implantan en la vaca. Allí, nueve meses después, si todo sale bien, nacerá un toro con el mismo material genético que el padre. Un clon. La técnica ha mejorado tanto que si en 1996 hicieron falta 277 intentos para que naciera la oveja Dolly, ahora basta con 10 intentos para conseguir un clon, según Viagen.
Los ejemplares gemelos de Alcalde no nacerán hasta marzo de 2009. La empresa tiene previsto implantar los embriones en las vacas españolas en junio de este año, tras crear el clon en su laboratorio.
Victoriano del Río es el que va más avanzado. Le sigue el andaluz Juan López Rubio, según Viagen. Otros dos ganaderos y dos empresarios interesados en clonar caballos de rejones han pedido el anonimato a la empresa.
Ricardo del Río explica: "Lo haremos como investigación. Avanzar en este sentido es una de nuestras inquietudes para garantizar la mejor genética". La intención de la ganadería es conseguir "dos o tres clones", tentarlos y quedarse con el mejor como semental. El destino del resto es morir en la plaza, en la que sería una de las primeras corridas de clones. Puede que no la primera porque Viagen tiene también en marcha la reproducción de Zalamero, un toro criado en México que fue indultado en 1994 por su bravura. El ganadero madrileño, también promotor inmobiliario, sólo quiere una copia de Alcalde, porque tener más le podría crear problemas de consanguinidad.
A Carlos Abellá, experto taurino y autor de libros como De Manolete a José Tomás, no le sorprende que Del Río sea el pionero: "Victoriano, con el que compartí mesa en la boda de Rocío Jurado, es de esos ganaderos que sabe que es depositario de una cosa única y quiere cuidarla. Él tiene el gusto, el placer y la responsabilidad de preservar la estirpe del toro bravo y para ejercerlo recurre a los avances científicos". Fundada en 1942, su ganadería se ha colocado en los últimos años entre las más codiciadas por las figuras del toreo, según Abellá. La ganadería tiene unos 25 sementales y cientos de cabezas de ganado.
Aunque la clonación de animales está extendida en EE UU (se reproducen campeones de rodeo o sementales de vacuno), en España no se ha realizado hasta ahora. El primer intento, el de clonar un bucardo -especie extinguida del Pirineo-, fracasó en 2003. No tenía al mundo del toro detrás.
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