"Es terrorismo judicial", dice Caracas

El ministro de Energía y presidente de Petróleos de Venezuela, Rafael Ramírez, negó ayer que la empresa Exxon haya logrado que se congelen activos de la estatal de hidrocarburos por 12.000 millones de dólares (8.400 millones de euros). Las órdenes judiciales fueron concedidas por tribunales de Estados Unidos, Reino Unido, Holanda y las Antillas holandesas.

"No tenemos ninguna decisión de ningún tribunal que sea definitiva. Tenemos una medida cautelar en una corte de Nueva York y tenemos el derecho de responder, es decir, es una medida transitoria", dijo Ramírez. Sin embargo, el ministro admitió que están "temporalmente" congelados 300 millones de dólares (206 millones de euros) en efectivo.

Ramírez acusó a Exxon de practicar el "terrorismo judicial", pero añadió que esas acciones no tienen ningún efecto "en el flujo de caja y en la situación operacional" de la petrolera venezolana. El ministro sostuvo que los activos de PDVSA ascienden a 73.710 millones de euros.

Pero Exxon no se fía, y quiere asegurarse de que va a obtener una compensación financiera en caso de ganar el arbitraje internacional planteado por su retirada forzosa de los proyectos de exploración que tenía en la faja del Orinoco, a pesar de que los contratos ya habían sido firmados.

Es un secreto a voces en Venezuela que PDVSA tiene graves problemas de liquidez, reflejados en las dificultades en hacer frente a los pagos internacionales. Recientemente, la estatal se vio obligada a subastar un barco petrolero cargado de crudo para obtener dinero en efectivo.

Ramírez dijo que están dispuestos a respetar el arbitraje y que si la primera petrolera privada del mundo pretende que el Gobierno venezolano "retroceda en las decisiones de nacionalización de la empresa petrolera, los señores de Exxon Mobil se volvieron a equivocar".