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Una menor podrá donar parte del hígado a su bebé

La juez entiende que Rocío, de 17 años, es "plenamente consciente" del riesgo

Los cinco meses que le faltan para cumplir 18 años no impedirán a Rocío donarle un fragmento de hígado a su hija Noara, de seis meses, aquejada de una atresia de vías biliares que le impide eliminar la bilirrubina. La ley prohíbe a los menores de edad ser donantes vivos, pero un Juzgado de Primera Instancia de Sevilla ha autorizado a Rocío P. LL. a donar parte del suyo a su bebé. La juez María Núñez entiende que la falta de capacidad legal de Rocío queda "suplida" por la certeza de que la menor es "plenamente consciente de los riesgos que implica la intervención" y porque ha decidido de forma "libre y consciente" someterse a ella.

Rocío se enteró a bordo de un tren de que la juez había dado el visto bueno para que pueda donar parte de su hígado a su pequeña Noara. La madre, que reside en Camas (Sevilla), fue a llevar a su hija a una revisión en el Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba. "Ha ido bien, simplemente en la analítica le ha salido algo alto el nivel de bilirrubina", dijo a la salida del hospital. Tras conocer ayer que la Justicia le da la razón, Rocío quiso dar "las gracias a la juez, al fiscal y a los médicos" que han apoyado su petición. Madre e hija pudieron marcharse al mediodía a su casa, en el domicilio sevillano de Camas.

La madre da "las gracias a la juez, al fiscal y a los médicos"

La resolución judicial abre una puerta nueva para Noara, que seguirá inscrita en la lista de espera para la donación procedente de un fallecido. "Ahora, si no llega un hígado, recurrirán a mí", explicó ayer Rocío. La próxima revisión médica de la pequeña está prevista para el 26 de noviembre.

El trámite que seguirá a partir de ahora el tratamiento de Noara será el mismo que el de cualquier otro caso de trasplante procedente de un donante vivo, según explicó ayer el coordinador autonómico de trasplantes en Andalucía, Manuel Alonso: Rocío comunicará la resolución judicial al hospital Reina Sofía, donde la joven tendrá que someterse a un estudio médico para confirmar la compatibilidad de su hígado con el organismo de su hija; después, los médicos remitirán al juez un expediente del caso, que incluirá un informe con los resultados de las pruebas médicas y otro del comité de ética del hospital.

Cuando tenga toda la información en su poder, el juez tomará declaración al médico que vaya a dirigir la operación de Rocío, al que haya estudiado a la paciente y al coordinador de trasplantes del Reina Sofía. Si, como se prevé, todos se muestran a favor de la intervención, el juez la autorizará. Según Alonso, este trámite puede demorarse entre 20 y 30 días.

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