El autor incomprendido de la Nueva Trova
Artistas cubanos y españoles recuerdan a Noel Nicola en un disco con 37 de sus temas
Fundó el movimiento de la Nueva Trova Cubana junto a Silvio Rodríguez y Pablo Milanés, aunque sin duda fue el menos conocido y afortunado del trío. Murió prematuramente en La Habana en agosto de 2005. Y ayer, dos años después de su muerte, Noel Nicola recibió un cálido homenaje en su ciudad, que fue a la vez un tributo y una reivindicación a su talento incomprendido. Amigos y admiradores de este "trovador sin suerte" se reunieron el lunes en la misma sala de la institución Casa de las Américas en que los tres músicos ofrecieron su primer concierto, allá por febrero de 1968, para presentar un doble álbum que ha sido patrocinado por la SGAE y recoge 37 de sus canciones, interpretadas por destacados artistas de Cuba, España y América Latina.
"Noel siempre tuvo uno de los sonidos más depurados. Usaba uñas y yemas a la vez; coloreaba, combinando diversos sonidos, llenando sus canciones de contrastes", dijo Silvio Rodríguez, el principal promotor de la iniciativa. "Siempre fue, como lo demuestran las grabaciones de aquellos años, uno de los más afinados y certeros intérpretes de nuestro grupo", aseguró al presentar el disco.
La lista de nombres es larga. Muchos fueron sus amigos y otros sólo admiradores póstumos, pues la vida escatimó a Nicola el reconocimiento que merecía su genio, admite hoy todo el mundo. Por Cuba: Silvio y Pablo, Sara González, Amaury Pérez y otros de sus compañeros de trova; los pianistas Chucho Valdés y Frank Fernández; compositores como Leo Brouwer y José María Vitier; las orquestas de salsa de Juan Formell y Adalberto Álvarez... Para resumir, un panorama completo de la música cubana. De España, Víctor Manuel, Luis Eduardo Aute, Caco Senante, Javier Bergia, Ismael Serrano y Javier. Y cantautores latinoamericanos como Víctor Heredia (Argentina), Tania Libertad (Perú) y Daniel Viglieti (Uruguay) participan en el homenaje.
Antes de morir -a los 58 años-, el propio trovador seleccionó 20 temas del disco, llamado 37 canciones de Noel Nicola y editado por el sello Ojalá, de Silvio Rodríguez. "Cuando supimos que Noel estaba enfermo y quizá sin remedio, empezamos a buscar pretextos para ayudarlo. Y es que nuestro amigo tenía un sentido del decoro muy estricto y no era dado a aceptar obsequios", contó Silvio, que dijo desear que esta iniciativa sirva de "provocación" para que se divulgue la obra de Nicola y su legado. "Noel fue un fundamental desconocido, una rica sustancia por revelar que una vez se autonombró trovador sin suerte", dijo Rodríguez en el entierro de Nicola. Dos años después, Casa de las Américas vivió el homenaje como un "acto de justicia".
Hijo del destacado guitarrista cubano Isaac Nicola, Noel fue famoso por su finísimo y ácido sentido del humor, plasmado en muchas de sus canciones, llenas también de lirismo.
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