Educación busca una salida para 500 personas con títulos universitarios no homologables

Después de cuatro años de estudios que ellos consideraban universitarios y totalmente oficiales, se encontraron con que su título no era homologable en España, no tenía ninguna validez legal. Ese es el limbo en el que se han quedado hasta 500 ciudadanos vascos que arrastran desde hace varios años su situación de indefinición. Ahora, se han constituido en asociación y el Departamento de Educación les busca una salida por medio de un certificado oficial que acredite su cualificación. Para ello se valdrá de una fórmula de certificación pionera en España.

Han estudiado cuatro años en un centro vasco asociado a una universidad francesa la diplomatura de gestión de empresas

"Desde el año 2000 damos palos de ciego en busca de una solución", declara el portavoz de la asociación de afectados

El País Vasco cuenta con un sistema de certificación de las competencias profesionales pionero en España

El caso es similar al que se descubrió hace dos semanas, cuando se supo que el Gobierno central investiga a 14 centros españoles que tienen acuerdos con la Universidad de Gales bajo la sospecha de que cometen ciertas irregularidades, principalmente la de ofrecer títulos y diplomaturas que después resultan imposibles de convalidar en España, lo que deja a los estudiantes sin nada.

En Euskadi, se ha producido una situación parecida, sólo que data de varios años atrás y tiene como protagonista a unos centros asociados a una universidad francesa. Hasta 11 promociones fueron saliendo de estos centros, alrededor de 500 estudiantes con la diplomatura de Gestión y Administración de Empresas, que han visto cómo han ido pasando los años sin que nadie homologue sus estudios.

"Hemos hecho una diplomatura universitaria", explica uno de los portavoces de la asociación que prefiere mantener el anonimato por ahora, "y no tenemos nada en realidad". "Cuando empecé los estudios, en el centro me dijeron que aún no estaban homologados en España, pero que iban a conseguir la validez en cuestión de muy poco tiempo. Yo aún tenía cuatro años de estudios por delante y no me podía imaginar que iba a ser imposible lograr la homologación". El centro que impartía los estudios tuvo que cerrar hace cuatro años, pero han quedado en el camino 500 personas con una formación cualificada que tienen complicado de demostrar.

Luz en el túnel

Se trata de una diplomatura que no es oficial. Para trabajar en la empresa privada tendrá el valor que ésta quiera darles, pero al ser títulos no homologables no tienen validez alguna si se quiere acceder a la empresa pública o la Administración. "Yo terminé los estudios en el año 2000 y desde entonces he ido dando palos de ciego para ver qué solución podía encontrar. La mayoría de los afectados no tiene absolutamente nada. Su experiencia laboral, pero nada más", abunda el portavoz.

Después de años de zozobra, al final parece que atisban una luz al final del túnel en el que se encuentran. El Departamento de Educación puso en marcha en el año 2004, dentro del Plan Vasco de Formación Profesional, el Sistema de Reconocimiento de la Competencia Profesional. Este puede ser su flotador. Se trata de una iniciativa para que los trabajadores que lo deseen obtengan un certificado oficial en el que figurarán sus competencias laborales y los cursos de reciclaje y formación que hayan realizado durante sus años de trabajo. Este sistema de certificación, pionero en España, no solo tiene en cuenta la experiencia y los cursos de reciclaje acumulados por un trabajador, sino que también le computará todos aquellos estudios no reglados que le hayan servido para profundizar en sus conocimientos.

Un equipo evaluador analiza la competencia de cada uno y determina si su experiencia y conocimientos son suficientes para lograr el certificado. Si existen dudas, el solicitante deberá realizar unas pruebas de competencia en empresas, que determinarán qué le falta para lograr la certificación y, si su aprendizaje es muy avanzado, los estudios que le quedan para titularse, si es que lo desea. Los títulos son los de FP de grado medio y superior. Gracias a este tipo de certificados, muchos trabajadores que sólo pueden acreditar experiencia disponen de un reconocimiento oficial para presentar en su currículum y en las oposiciones a las que se presenten.

El reto para el sistema es de gran magnitud, dado que hasta ahora los que acudían eran trabajadores con mucha experiencia profesional, pero con poca formación a nivel de estudios. "Lo normal", señala el coordinador del sistema, Luis Herrero, "es que vengan con experiencia y un poco de formación y esto es al revés, muchísima formación reglada, al menos cuatro años, y menos experiencia. Estamos analizando qué tipo de competencia se les puede reconocer por esa formación no regulada y es una gran parte del título de FP correspondiente a Gestión y Administración de Empresas". Pero no es todo el título. "Hay que ver si con su experiencia laboral logran los módulos que les faltan para completar el título y, en caso contrario, harán una formación".