El IVA de Sarkozy da un balón de oxígeno a Royal en la recta final de la campaña
Los socialistas utilizan la medida económica como principal crítica al Gobierno francés
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, se ha visto obligado a matizar la idea lanzada por su primer ministro, François Fillon, de subir cinco puntos el impuesto sobre el valor añadido (IVA) -que pasaría a situarse en el 24,6%-, que se ha convertido en una inesperada ayuda para los desmoralizados candidatos socialistas a la segunda vuelta de las elecciones legislativas, que tendrá lugar mañana. El presidente "no aceptará ningún aumento (...) que tenga como consecuencia reducir el poder adquisitivo de los franceses", anunció ayer el palacio del Elíseo.
La idea del llamado IVA social, que han puesto en práctica países como Dinamarca o Alemania para cubrir los déficit generados por las prestaciones sociales, ha caído como una bomba en el último tramo de las legislativas. Desde el campo socialista, Ségolène Royal lo ha convertido en su caballo de batalla para limitar la anunciada victoria de la mayoría presidencial en torno a la Unión por un Movimiento Popular (UMP). En todos los mítines a los que ha acudido, la ex candidata socialista ha denunciado que "los regalos fiscales que Sarkozy ha hecho a los ricos los pagarán ahora todos los franceses con un impuesto injusto". La líder de la izquierda advertía: "La marcha atrás de Sarkozy sobre el IVA social es provisional, el tiempo para dejar pasar la jornada electoral".
El propio Fillon, que se multiplica en los mítines de la derecha, rectificó ayer en una entrevista a Le Figaro, señalando que la idea ha sido simplemente puesta sobre la mesa y que serviría para reducir las cotizaciones sociales de las empresas y aumentar su competitividad. No sería, pues, un IVA social, sino más bien un "IVA antideslocalización" y no será puesto en práctica si no existe "la certeza de que no provocará una subida de los precios", señalaba. Una precisión que no hacía sino confirmar las denuncias de la izquierda de que la decisión ya está tomada.
El Gobierno ha encargado un estudio al ministro de Economía y Trabajo, Jean-Louis Borloo, y al que fuera encargado de asuntos económicos del Partido Socialista (PS) Eric Besson, ahora secretario de Estado de Evaluación de Políticas Públicas, después de que desertara de su partido tras un enfrentamiento con Royal. Fillon recordaba ayer en Le Figaro que el ex ministro de Finanzas socialista Dominique Strauss-Kahn propuso en 2005 el IVA social y que la experiencia alemana y danesa muestra que "la transferencia de una parte de los impuestos hacia el IVA puede no producir un alza en los precios". Strauss-Kahn, cuyo escaño está en juego, le respondía señalando que "lo que no funciona en el IVA social es que no es social, sino patronal". "Los precios van a subir", añadía, "no se puede contar que cuando el IVA sube cinco puntos los precios no van a moverse, eso es imposible".
Chirac pierde hoy su inmunidad
El ex presidente francés Jacques Chirac perderá hoy la inmunidad que le protege de hasta cinco sumarios judiciales en los que está implicado. Se abre así la posibilidad de que sea citado por los jueces, sea en condición de simple testigo o directamente como imputado, y a tenor de las actitudes y declaraciones de quienes le han sucedido, no parece que vaya a beneficiarse de protección. "El presidente de la República es un justiciable como cualquier otro una vez que cesa en sus funciones", decía el primer ministro, François Fillon.
Esta semana, el semanario satírico Le Canard Enchainé aseguraba que los jueces del caso Clearstream -el famoso asunto de las falsas listas de comisiones que acusaban falsamente al ahora presidente Nicolas Sarkozy- se disponían a citar a Chirac como testigo el lunes, lo que fue desmentido por la Fiscalía de París.
Pero los problemas del antiguo inquilino del palacio del Elíseo tiene relación con otros sumarios, concretamente con los que se remontan a la época en que Chirac era alcalde de París.
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