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Los médicos amenazan a Osakidetza con el "mayor conflicto" de su historia si no negocia

Protestan por la escasez de plantilla, las condiciones de trabajo y la remuneración de las guardias

Los médicos aumentan la presión sobre el Servicio Vasco de Salud-Osakidetza, al que le crecen los problemas sin cesar. El Sindicato Médico de Euskadi (el mayoritario entre el colectivo de facultativos) amenazó ayer a Osakidetza con plantearle el "mayor conflicto" de su historia a la vuelta de las vacaciones de verano, si no empieza a negociar "con seriedad" la mejora de las condiciones laborales para los médicos. El Sindicato Médico de Euskadi (SME) se une así a otros sindicatos como ELA y SATSE (enfermería) que llevan enfrentados al Departamento de Sanidad desde hace dos años y han protagonizado varias huelgas desde entonces.

El SME ha notificado un paro de 24 horas para el próximo 8 de junio, al que ha convocado a los 6.000 médicos de la plantilla del Servicio Vasco ded Salud. Esta huelga pretende ser una especie de aldabonazo, el aviso de lo que puede venir después, si "Osakidetza no da un giro y se centra en una negociación seria y a fondo de los problemas que aquejan al colectivo", advirtió el secretario general del SME, Kepa Urigoitia.

A esta medida de presión se suma la huelga que protagonizan los médicos internos residentes (MIR) desde hace dos semanas y las críticas de la Federación de Facultativos de Hospitales de Euskadi ha dirigido al departamento que dirige Gabriel Inclán por la "incapacidad" de sus gestores. "Esto [Osakidetza] se hunde", han llegado a decir.

Entre los principales asuntos que enfrentan al SME con el departamento figuran la carrera profesional -"que es causa de desmoralización entre la plantilla"- y las "pésimas" condiciones de trabajo de atención primaria. La regulación de las guardias -"Euskadi es la antepenúltima comunidad en la remuneración de la hora de guardia", afirma-, la escasez de plantilla, la pérdida salarial (un 15% desde 1992) y la supresión de la exclusividad son otros de los puntos de controversia. En este último asunto, el SME pide que el complemento se extienda al conjunto de los médicos del sistema: los que trabajan sólo para la red pública (y lo cobran) y los que se dedican a la pública y la privada (y no lo cobran). Supone 800 euros brutos al mes.

Osakidetza mostró ayer su sorpresa ante la convocatoria del paro por parte del SME y expresó su confianza en que la situación se reconduzca en la reunión que la mesa sectorial de sanidad celebrará el 6 de junio. "Algunas reivindicaciones se podrán abordar", aventuró.

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