Inclán asegura que no permitirá la marcha de ningún especialista por no saber euskera

El consejero de Sanidad, Gabriel Inclán, aseguró ayer de forma solemne en el Parlamento que no dejará que se marche ningún especialista médico de Euskadi por no saber euskera. En un momento en el que se han disparado las alarmas en toda la Unión Europea por la escasez de médicos y algunas comunidades han empezado a contratar a especialistas extranjeros, Inclán tuvo que fajarse a fondo en la Cámara ante las reiteradas preguntas que le hizo el PP para garantizar que el desconocimiento del euskera no hará emigrar a ningún médico fuera de Euskadi.

Inclán mantuvo un duro cara a cara con la parlamentaria popular Laura Garrido durante la sesión de control al Gobierno en el pleno celebrado en la Cámara de Vitoria. El excesivo valor que, según el PP, se concede al euskera en las oposiciones de Osakidetza fue la chispa del agrio debate, en el que ambos se cruzaron acusaciones de mentir en su propio beneficio.

Garrido le interpeló primero por la "desmesurada" puntuación que se ha concedido al conocimiento del euskera en los exámenes de la Oferta Pública de Empleo convocada por Osakidetza a finales del año pasado y a la que se han presentado más de 80.000 personas. Un 25% de las plazas tenía asignado un perfil y para el resto el euskera contaba como uno de los principales méritos para obtener puntos, una vez superado el examen eliminatorio. "Al valorarse de forma exagerada el euskera con relación a otros méritos, como doctorados o conocimiento del inglés, se produce una exclusión injusta de excelentes profesionales que no pueden formar parte del personal de Osakidetza", se quejó la parlamentaria popular.

Garrido acusó al consejero de estar "euskaldunizando la plantilla a marchas forzadas para mayor gloria del nacionalismo", lo origina "una pérdida de la calidad del servicio y la marcha de médicos a otras comunidades".

Mal común

Inclán rechazó tajante que se esté produciendo esa fuga y argumentó que comunidades como Madrid, Murcia, Extremadura o Castilla-La Mancha se encuentran "en una situación mucho peor que nosotros en cuanto a falta de especialistas". "Y allí no les exigen el euskera", remachó. Según Inclán, la falta de médicos es un mal común a todos los servicios de salud, y lo achacó a la "nefasta" política de formación de médicos que siguió el PP durante los ocho años que gobernó en España. Recordó el consejero que la Ley de Normalización Lingüística se aprobó en 1982 y que hasta 2003 no se aprobó el plan de euskaldunización de Osakidetza. "Se trata de un plan apoyado en bases realistas y sin ningún tipo de fundamentalismo", explicó.

El debate entre Garrido e Inclán fue subiendo de tono, hasta que Inclán afirmó contundentemente que no permitirá que nadie se marche de la comunidad por no saber euskera. "Jamás sacrificaré a un profesional médico por no saber euskera", dijo. A pesar de ello, la parlamentaria del PP siguió insistiendo en que la valoración excesiva del euskera es una de las causas que causa la falta de personal, especialmente en pediatría. En ese punto, Inclán le lanzó un órdago desde la tribuna de oradores: "Dígame el nombre de un solo pediatra que no haya sido contratado por el euskera".

La polémica sanitaria siguió con la carrera profesional de enfermería, aprobada por el Gobierno hace un mes y que no ha gustado al Sindicato de Enfermería (SATSE). Esta central ha convocado hoy una manifestación en Bilbao para exigir que el consejero de Sanidad "recapacite y rectifique", devolviendo a la mesa de negociación el modelo de desarrollo profesional de las enfermeras. Según el SATSE, con esta carrera las enfermeras vascas estará entre las peor pagadas de España. Frente a esta crítica, el Departamento de Sanidad ha presentado la tabla de salarios de las enfermeras de toda España, teniendo en cuenta el salario más el complemento de carrera correspondiente al nivel II (al que accederán casi todas las enfermeras en una primera fase).

En atención primaria, los emolumentos para una enfermera vasca ascienden a 30.647 euros al año (los más altos de las comunidades autónomas), por delante de Navarra, con 30.500. En atención especializada, las enfermeras vascas también son las mejor pagadas, con 30.967 euros al año, según los datos del departamento. Inclán afirmó que su equipo intentó negociar con el SATSE, pero "ni quisieron ver las propuestas".