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Bruselas aprueba con condiciones el plan de emisiones de CO2 español

La Comisión Europea exige una rebaja adicional del 0,2% de los gases contaminantes

Ana Carbajosa

La Comisión Europea aprobó ayer con ciertas condiciones el plan español que fija las toneladas de emisiones que la industria podrá expulsar a la atmósfera desde el año que viene y hasta 2012. Bruselas consideró que el plan español es "muy sólido", pero exigió un recorte adicional del 0,26% de las emisiones de CO2. También estableció un tope del 20% para los créditos para contaminar que las empresas pueden comprar fuera de España. La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, aseguró ayer que se trata de "un retoque fácil de hacer".

"Doy la bienvenida a la ambiciosa determinación del Gobierno español de utilizar el comercio de emisiones como un elemento fundamental para cumplir los compromisos de Kioto", dijo ayer el comisario europeo de Medio Ambiente, Stavros Dimas, en un comunicado.

Con este segundo plan nacional de asignación de derechos de emisión, el Gobierno pretende acercarse a los objetivos de cumplimiento del Protocolo de Kioto. Éste establece para los 15 países de la UE anteriores a la ampliación una reducción de las emisiones del 8% en 2008-2012 respecto al nivel de 1990, pero el reparto de cuotas dentro de la Unión permite que España aumente un 15%. Las emisiones españolas de gases de efecto invernadero no han dejado de crecer a un ritmo desenfrenado desde principios de los noventa y en 2005 superaron ya el 50%. España, uno de los países que más se aleja de Kioto, se propone contener el aumento final en un 37%.

El Ministerio de Medio Ambiente asegura que los primeros indicadores muestran que 2006 fue el primer año en el que no crecieron las emisiones. Narbona dijo ayer que el recorte impuesto por la UE supondrá sólo un "ligero retoque", informa María Morgado.

Bruselas ha dado el visto bueno al plan español, pero además de exigirle una pequeña reducción adicional, pide más información sobre las instalaciones emisoras de gases de efecto invernadero y sobre cómo se repartirán los derechos de emisiones entre las empresas energéticas. La Comisión pide también que reduzca del 39% al 20% de las toneladas permitidas los derechos de las empresas a comprar créditos a otros países para contaminar. El Ejecutivo comunitario indicó ayer que la aprobación definitiva del plan se producirá cuando España haya acometido los cambios. Bruselas ya ha evaluado 13 planes nacionales. La media de las reducciones de permisos de emisiones a la industria que ha exigido a estos países ronda el 7%.

También ayer, la Agencia Europea de Medio Ambiente hizo público un informe en el que explica que el transporte, responsable en Europa del 21% de las emisiones de gases de efecto invernadero (sin contar las de los aviones y barcos), no ha dejado de crecer, lo que supone "un obstáculo fundamental" para alcanzar los objetivos de Kioto. España está entre los países europeos en los que más ha aumentado la demanda de utilización del transporte, casi un 100% respecto a principios de los noventa.

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Sobre la firma

Ana Carbajosa
Periodista especializada en información internacional, fue corresponsal en Berlín, Jerusalén y Bruselas. Es autora de varios libros, el último sobre el Reino Unido post Brexit, ‘Una isla a la deriva’ (2023). Ahora dirige la sección de desarrollo de EL PAÍS, Planeta Futuro.

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