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Los planes urbanísticos deben ajustarse a la Ley de Calidad del Aire

Las instalaciones que contaminen las ciudades podrán ser sancionadas con multas de hasta dos millones de euros, según el proyecto de Ley de Calidad del Aire y Protección de la Atmósfera, aprobado ayer en Consejo de Ministros. Esta norma obligará a las comunidades autónomas a enviar de forma periódica a Medio Ambiente datos sobre contaminación atmosférica, y condicionará los planes urbanísticos de ayuntamientos y comunidades. El Gobierno central y los autonómicos fijarán los límites de las emisiones y las normas urbanísticas.

La nueva reglamentación, uno de los instrumentos de la Estrategia Española de Calidad del Aire, obliga a los municipios de más de 250.000 habitantes a tener instalaciones de evaluación, a informar a la población sobre los niveles de contaminación y a elaborar planes para el cumplimiento de los objetivos de calidad del aire. Si se superan los niveles de contaminación se deberán elaborar planes de reducción que serán determinantes en los proyectos urbanísticos.

Contra la contaminación

"Quien contamina paga", declaró ayer la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. Aparte del control de las emisiones, la ley incluye planes de movilidad y se tendrá que incluir en los planes de ordenación del territorio la lucha contra la contaminación.

La Ley de Calidad del Aire, que sustituye a una normativa de 1972, incluye en un catálogo todas las fuentes potenciales de contaminación, tanto las causas -fuentes y contaminantes- como los problemas -salud, ambientales y materiales-. La contaminación causa cada año en España unas 16.000 muertes prematuras, según la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona.

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