El Ébola pone a los gorilas occidentales en peligro de extinción

El mortal virus de Ébola no sólo ha afectado a las personas en África occidental en varios brotes alarmantes en los últimos años. Se está cebando sobre todo en los gorilas de llanura de la República del Congo. Investigadores españoles han confirmado la enorme mortandad (que alcanza más del 90% en la zona estudiada) atribuida a la enfermedad, la cual han comprobado que se transmite de familia en familia de forma epidémica y avanza hacia el sureste.

Los alarmantes datos obtenidos por Magdalena Bermejo y sus colaboradores no sólo indican una situación desesperada de los gorilas en una zona de 2.700 kilómetros cuadrados alrededor del santuario de Lossi (donde esta investigadora lleva estudiando estos animales desde 1995), sino que confirman el avance del virus por África. Esto tiene implicaciones para las poblaciones humanas, que suelen contagiarse por la ingestión de carne de chimpancé o de gorila.

Los investigadores, de la Universidad de Barcelona y de Suecia y Alemania, estiman que han muerto al menos 5.000 gorilas en los últimos años en la zona estudiada. En el resto de la extensa área selvática habitada por estos animales no se dispone de datos, pero se estima que la mortandad ha acabado en los últimos años con un cuarto de los ejemplares. Si el virus sigue extendiéndose, señalan los investigadores en la revista Science, donde publican hoy sus datos "y añadimos la caza comercial, tenemos una receta para una rápida extinción biológica". Respecto a los chimpancés, hay menos datos, pero se estima una mortandad del 83%.

"Lo que hemos hecho es el primer censo de gorilas en la zona, con lo que hemos confirmado y concretado la mortandad, ya apuntada anteriormente, y la asociamos al Ébola", explica José Domingo Rodríguez Teijeiro (Universidad de Barcelona). "Al oeste de un río, que pasa por el meridiano 14,55 Este, la zona está casi vacía de gorilas, mientras que al este hay todavía poblaciones normales". Además, los investigadores han encontrado cadáveres de gorilas y atribuyen esta mortandad al Ébola por varias razones, entre ellas que el virus se ha identificado en la autopsia de nueve ejemplares, una operación con grandes dificultades, dada la peligrosidad del Ébola y el escenario selvático.

Los científicos no han tomado precauciones especiales para hacer el censo: "Lo único, no tocar los animales muertos, que son difíciles de encontrar porque en la selva desaparecen en pocos días como alimento para otras especies, o sus restos", comenta Rodríguez Teijeiro. Entre octubre de 2003 y enero de 2004, vieron desaparecer a 91 de los 95 individuos que estaban controlando, pertenecientes a siete grupos sociales. Los fallecimientos se produjeron con 11,2 días de media de diferencia entre las distintas familias, un periodo muy similar a los 12 días de la enfermedad en humanos. La conclusión, según este investigador, es que el virus se transmite entre familias, algo que hasta ahora no se sabía. Aunque el gorila es un animal territorial, los grupos se mezclan algunas veces, por ejemplo para comer los frutos de un árbol.

Sin embargo, la procedencia primaria del Ébola que mata a los gorilas sigue siendo un misterio. Recientemente, se ha identificado a un tipo de murciélago como reservorio y transmisor del virus, pero no se sabe si hay más especies que actúen como reservorio (que porten el virus pero no se vean afectadas por él).

A pesar de la difícil situación que muestra el estudio, también abre la puerta, según sus autores, a la posibilidad de vacunar a los gorilas para evitar la extensión de la enfermedad. Otros expertos, sin embargo, explican en Science que esta estrategia plantea muchas dificultades y que no creen que se vaya a hacer nada efectivo pronto.

El trabajo de Bermejo y sus colegas ha sido financiado en su mayor parte por la Unión Europea. Además de los gorilas de llanura occidentales (Gorilla gorilla gorilla) existen otras dos especies (una de llanura y otra de montaña) que viven en el oeste de África tropical.