Bide Ertzean canta a los desaparecidos de la Guerra
Aún sabiendo que "no es algo muy habitual", Bide Ertzean han decidido plantear su sexta entrega como un disco conceptual, temático, planteado como "recuerdo a los desaparecidos en la Guerra Civil". El grupo está comandado por los hermanos Imanol y Joni Ubeda, cuyo abuelo, miembro de la CNT, desapareció en Francia tras combatir en el bando republicano. Su bisabuelo, miembro de la UGT, fue fusilado tras la entrada de los nacionales en Alsasua, y su familia abocada al destierro. El escozor y la curiosidad provocadas por esas circunstancias se han traducido ahora en las 13 canciones de Non dira (Gaztelupeko Hotsak).
Para dar forma a las canciones se han documentado leyendo libros, como Trece rosas rojas, de Carlos Fonseca, y viendo documentales sobre la contienda. Han encontrado inspiración en asociaciones como la catalana Les Dones del 36, en frases del bertsolari republicano José Mari Lopetegi y en otras tomadas de Canciones de lucha / Songs of battle 1936-1939, recopilación realizada por el investigador y musicólogo Carlos Palacios. Y también aprovechan recuerdos de ex combatientes con los que han charlado y la labor de recuperación musical abordada hace cinco años por Joseba Tapia en el disco Agur intxorta maite. 1936-37 gudako kantuak.
Con esos mimbres, han confeccionado un disco lleno de pop rock de agradable escucha, esqueleto acústico y arreglos de piano y Hammond a cargo de Joserra Senperena (Fito & Fitipaldis, Duncan Dhu). Es un trabajo relajado que ensalza el idealismo del bando republicano, señala el dolor que invade la casa de los desaparecidos y el silencio que atormenta al exiliado. Con esa temática, es inevitable que musicalmente el disco tenga "un punto dramático", aunque el cantante y compositor Imanol Ubeda insiste en que "la música es actual".
Non dira es el primer álbum compuesto exclusivamente por textos de cosecha propia en la discografía de un conjunto que antes también ha puesto música a varios versos de poetas y bertsolaris. "Si este disco ahora invita a reflexionar a nuestro público, o a preguntar qué fue esto de la guerra, ya estamos contentos", expone Ubeda. "No queremos hacer de historiadores; hacemos canciones. No queremos ponernos sobre el bien y el mal y decir cuál es la verdad. Hemos contado nuestra historia, lo que hemos vivido nosotros y las sensaciones que nos ha dado".
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