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Tribuna:SEMANA DE CINE FANTÁSTICO Y DE TERROR DE SAN SEBASTIÁN
Tribuna
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El pulpo, el cangrejo y la semana

Cuando me piden que explique en unas breves líneas qué hace diferente a la Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián de otros festivales, sólo se me ocurre una razón clara: el público. Pero para explicarlo, lo mejor es contar algunas breves anécdotas. Un conocido crítico catalán comentaba hace unas pocas ediciones que había visto una película en un festival que era francamente mala y aburrida. Y añadía que, poco después, había visto otra de igual título en la Semana (era la misma película) que era maravillosa y muy divertida. ¿Cuál era la diferencia entre una y otra proyección? El público. En la Semana el público grita, interpela a los actores, canta... Es el protagonista. Y de hecho, los premios más importantes, como el de mejor película, los otorga el público por votación.

En otra ocasión, por un error humano, se vendieron unas sesenta entradas de más para una de las noches locas (a veces los maratones nocturnos llegan hasta las siete de la mañana). La sala estaba abarrotada y no se podían empezar las proyecciones porque gran cantidad de público no encontraba ninguna butaca libre. Cuando me comunicaron lo que había pasado salí al escenario a explicarlo (me temblaban las piernas...). El público recibió mis palabras con aplausos, se sentó por el suelo de la mejor manera que pudo y la noche fue un éxito sin ningún incidente. El espectador tipo de la Semana es un buen conocedor del género y una persona apasionada. Pero, sobre todo, suele ser muy generoso.

Otra noche, en la presentación de Karate a muerte en Torremolinos (la peli de Pedro Temboury donde una banda de surfistas católicos nos salvan del peligro mutante), un asiduo amigo de la Semana salió a presentar la película disfrazado de una especie de pulpo-crustáceo muy divertido. Para aquella hora de la noche su estado era muy lamentable... Y a pesar de los consejos de algún miembro de la organización, se fue escorando peligrosamente hacia un lateral del escenario y en un momento determinado desapareció por el mismo. Se acababa de pegar un viaje de cuidado. Nos dio un buen susto y se le subió rápidamente a urgencias. Apenas una hora después estaba de vuelta en el teatro Principal. De aquella noche sólo queda un divertido parte médico que habla de una persona disfrazada de pulpo (inexacta descripción) que llegó en un estado de intoxicación importante a la consulta y que salió por su propio pie de la misma.

¿Y qué más es la Semana? Pues un lugar de encuentro multidisciplinar (en la línea de la programación estable y habitual de Donostia Kultura, Patronato Municipal de Cultura de la ciudad y organizador de la Semana) en donde hay, entre otras actividades, teatro de calle, exposiciones (este año podemos disfrutar de la obra y de la presencia de Paco Alcázar y de la leyenda viva del cómic Bernie Wrightson, creador de La cosa del pantano y autor de una insuperable versión ilustrada del Frankenstein de Mary Shelley), karaokes salvajes y mucho cine. Se podrán ver películas que ya han pasado por nuestro hermano mayor y amigo, el Festival Internacional de Cine de Catalunya de Sitges, como The Host, que ha sido calificada por Variety como la mejor monster-movie de la historia del cine; Grimm Love, historia de amantes caníbales basada en hechos reales y prohibida en Alemania, o Los abandonados, el brillante debut en el largometraje de Nacho Cerdá.

Y estrenos europeos, como Black Sheep, divertida película neozelandesa que ha sido comparada con el Braindead de Peter Jackson, o End of the Line, del canadiense Maurice Deveraux, donde un grupo de ultracatólicos quieren arreglar el mundo con la cruz... y la espada. Y estrenos en España, como Nightmare Detective, de Shinya Tsukamoto, que llega a San Sebastián tras su estreno mundial en el festival de Roma. O Morirás en tres días, con la cual el cine austriaco se atreve con el género y sale triunfador del reto. Y cine para niños, y cortometrajes... Y un buen puñado de sorpresas. Y, sobre todo, la Semana volverá a ser un espacio libre de encuentro en el que ciudadanos que no se conocen de nada comparten durante unos días su pasión por el género fantástico y de terror.

José Luis Rebordinos es coordinador de la Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián.

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