Gehry hará un museo de arte contemporáneo en París financiado por Arnault

Es un nuevo episodio de la "guerra de los millonarios". Si François Pinault, al frente de una constelación de empresas y marcas entre las que destacan la FNAC o Gucci, renunció en su momento a crear una fundación de arte contemporáneo en París en la que mostrar su colección, Bernard Arnault, el hombre de Louis-Vuitton o Dior, anunció ayer que pone a disposición del arquitecto Frank Gehry un presupuesto de 100 millones de euros para que le construya un edificio en el Bois de Boulogne, en la zona del jardín de aclimatación, escenario proustiano por excelencia. Arnault desveló su proyecto en compañía del alcalde de la ciudad, Bertrand Delanoë; del ministro de Cultura, Renaud Donnedieu de Vabres, y del arquitecto. "Las obras empezarán en 2007 y acabarán a finales de 2009 o principios de 2010", dijo un Arnault seguro de haber ganado allí donde su rival se estrelló.

La fachada del edificio la constituyen diversas superficies curvas de cristal. "Mi primera idea fue la de construir una nube transparente. Luego quise garantizar la perfecta continuidad entre exterior e interior, y de ahí que el último piso esté dedicado a contener un jardín", explicó Gehry tras revelarnos que París es su "ciudad favorita" y que "después de beber tres vasos de vino, uno se vuelve francés".

"Gehry ha aceptado respetar todos los límites que impone el reglamento de urbanismo de París, que no son pocos. Al final construirá menos metros cuadrados de los que destruirá y plantaremos más árboles de los que habrá que cortar", especificó un Delanoë eufórico.

La especificidad de la nueva fundación, el no ser, en palabras de Bernard Arnault, "una fundación más", radicará en su voluntad de "poner en relación la creación contemporánea con sus orígenes. Por ejemplo, no se comprende a Damian Hirst si no se presenta junto a Francis Bacon. Queremos explicar, no limitarnos a mostrar. Se trata de proyectar las raíces en el mundo de hoy".