Una flota de cinco buques transportará en dos semanas a las tropas españolas
El 'Galicia', el 'Pizarro', dos fragatas y un petrolero se preparan para zarpar el próximo día 8
El buque de asalto anfibio Galicia, el buque de desembarco Pizarro, dos fragatas y un petrolero componen la flota que prepara la Armada para trasladar a Líbano al primer contingente de tropas españolas, un batallón de Infantería de Marina con unos 450 efectivos. La flota -más potente que la que llegó a Irak en abril de 2003- estará lista para zarpar de Rota el próximo día 8, después de que el Congreso apruebe la participación española en la fuerza de la ONU para Líbano. La duración del viaje se estima en seis días, por lo que la flota podría estar en Líbano el 14 de septiembre.
El alistamiento de la flota, con casi un millar de marineros, ya ha comenzado. Su objetivo es estar preparada para zarpar sin perder un minuto en cuanto se reciba la luz verde política.
A bordo viajarán, además de las tripulaciones, un batallón de Infantería de Marina con unos 450 efectivos, cuya misión es preparar el terreno para la llegada de la Legión, que tomará el relevo en octubre o noviembre.
La flota (una Task Force, en terminología OTAN) será la más potente enviada por España a una misión en el exterior en los últimos años. La agrupación naval que acudió en marzo de 2003 a Irak, por decisión del Gobierno de Aznar, la formaban tres buques: el Galicia, una fragata y un barco de apoyo logístico.
La función del Galicia no se limita a trasladar las tropas españolas, sino también a servirles de base hasta que dispongan de un acuartelamiento adecuado en tierra. El barco cuenta con un hospital y puede suministrar todo lo necesario, desde agua potable hasta municiones.
El Pizarro, por su parte, permitirá desembarcar en barcazas todo el material del contingente -desde los blindados Hummer a los vehículos de combate Piranha-, incluso si no hubiera ningún muelle disponible; mientras que las fragatas darán escolta y protección a toda la flota.
El despliegue de las tropas españolas en Líbano se realizará en dos fases. En la primera, que debe iniciarse el próximo viernes, se enviará un batallón de Infantería de Marina, con unos 450 efectivos, y un contingente del Ejército de Tierra con unos 300 soldados. Este último estará formado por la Unidad de Apoyo al Despliegue (UAD) y los núcleos del cuartel general y de la unidad de apoyo logístico (NSE) entre otros elementos. Es probable que la mayor parte de los militares de Tierra se desplacen por vía aérea, aunque sus equipos pesados vayan a bordo de los buques.
En una segunda fase, aproximadamente mes y medio después de la llegada de la Infantería de Marina, ésta será relevada por la Legión, que enviará un batallón reforzado de unos 800 militares.
El Consejo de Ministros tiene previsto aprobar mañana la participación española en la Fuerza Interina de Naciones Unidas para Líbano (FINUL), que debería incluir las dos citadas fases.
En principio, el Gobierno prevé mantener el límite máximo de 3.000 efectivos para el conjunto de las operaciones en el exterior. Según datos oficiales, el pasado día 8 había 2033 militares en los Balcanes, Afganistán y Congo, por lo que la cifra para Líbano no debería llegar al millar. Los estados mayores están, sin embargo, rebañando y recortando allá donde es posible para aumentar el contingente.
Uno de los elementos que más determinan la cifra final de efectivos es el hecho de que España asuma el mando de una de las dos brigadas multinacionales que integrarán la FINUL, pues en ese caso debería aportar no sólo su estado mayor sino también elementos de apoyo.
El jefe de la cúpula militar, general Félix Sanz, dijo ayer que es "prematuro" afirmar que España mandará una brigada multinacional, mientras que el jefe de la Flota, el almirante Ángel Tello, lo dio por hecho y agregó que, probablemente, la zona bajo responsabilidad española sea la sureste, a unos 100 kilómetros de la costa, junto a los altos del Golam y las granjas de Chebaa, ambos ocupados por Israel.
Una de las misiones de la comisión de reconocimiento española que llegó ayer a Beirut (Líbano) será examinar las condiciones que reúne dicha zona.
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