_
_
_
_
Trama terrorista en Reino Unido

Bush afirma que Estados Unidos está en guerra contra "fascistas islámicos"

Washington sospecha que los atentados eran inminentes y apunta a Al Qaeda

Yolanda Monge

"La trama descubierta apunta a Al Qaeda", aseguró ayer el secretario de Seguridad Interior de EE UU, Michael Chertoff. A su lado en la rueda de prensa en Washington, el director del FBI, Robert Mueller, y el fiscal general del Estado, Alberto Gonzales. El presidente del país, George W. Bush, aterrizaba en Wisconsin con el Air Force One procedente de Tejas para visitar una planta metalúrgica y hacía las primeras declaraciones sobre el compló terrorista: "Es un claro recordatorio de que esta nación está en guerra contra fascistas islámicos que quieren destruir nuestra libertad y nuestro país".

Más información
Londres desbarata un "asesinato masivo"
Estados Unidos multiplica los controles en los aeropuertos

En una improvisada alocución ante la prensa, un presidente Bush algo inseguro en su discurso calificó de "excelente" la cooperación habida entre el Reino Unido y EE UU. "Quiero dar las gracias a Tony Blair", declaró Bush, para a continuación relatar su ya conocido sermón. "Este país es más seguro de lo que era antes del 11-S, pero no estamos totalmente seguros porque existe gente que nos quiere dañar por lo que creemos". El presidente aprovechó la ocasión para manifestar que por todas esas razones "nos proveemos de todas las herramientas necesarias para luchar, porque es un error creer que los Estados Unidos de América están libres de amenaza".

Antes de salir de Tejas, el presidente fue informado al segundo en su rancho de Crawford sobre la investigación en marcha que ha conducido a la detención de 21 personas en el Reino Unido relacionadas con el plan terrorista. El secretario de prensa de la Casa Blanca, Tony Snow, informó de que Bush había ordenado elevar el nivel de seguridad hasta el color rojo -el máximo en una escala de cinco de riesgo de ataque terrorista- para todos los vuelos provenientes de Reino Unido. El nivel naranja se aplica desde ayer a todos los aeropuertos y vuelos estadounidenses. "Creemos que el plan estaba relacionado con vuelos procedentes del Reino Unido que se dirigían a EE UU, lo que supone una amenaza directa contra Estados Unidos", dedujo Snow. El incremento del nivel de seguridad es "un inconveniente necesario" ante la inminente amenaza. "Nunca se hace demasiado cuando se está tratando de salvar vidas", confesó el portavoz a los periodistas que viajan con el presidente a bordo de su avión privado, informa Associated Press. Pero a pesar de la intimidación creada, Snow tranquilizó a los presentes: "Es seguro viajar".

Los terroristas tenían como objetivo las compañías estadounidenses United Airlines, American Airlines y Continental, según dos responsables de inteligencia. El compló, que consistía en causar explosiones en pleno vuelo con líquidos químicos llevados en el equipaje de mano, debía ser llevado a cabo en aeronaves dirigidas a Nueva York, Washington y Los Ángeles, todos ellos destinos turísticos de verano, siempre según el Departamento de Seguridad Nacional. Según Chertoff, los terroristas estaban en la fase final del plan.

Ayer, en los aeropuertos del país existían letreros advirtiendo de la prohibición de subir a bordo con "líquidos, geles o lociones", entre lo que está incluido cualquier maquillaje, crema bronceadora o pasta de dientes. Los productos infantiles y las medicinas quedaban exentas de la restricción.

"Estamos tomando algunas medidas muy serias, aunque molestas", advertía Chertoff. Aseguró que consideraba más razonable incrementar al límite la alarma para luego ir bajándola poco a poco, que no hacer nada. Para el secretario de Seguridad Nacional, no había constancia de que hubiera terroristas dentro de Estados Unidos implicados en la trama, pero que no podía asegurar que la operación llevada a cabo por Scotland Yard hubiera frustrado por completo la maquinación terrorista.

Chertoff dijo que el plan de ataque parecía diseñado por Al Qaeda, la red terrorista responsable de los atentados del 11 de septiembre contra Estados Unidos. "Era complejo, contaba con muchos miembros y tenía alcance internacional", declaró. "Todo sugiere un plan de Al Qaeda". "Tiene reminiscencias del Plan Bojinka, que en 1995 pretendía derribar 12 aviones comerciales entre Asia y Estados Unidos. Éste se atribuyó a Ramsi Ahmed Yusef, implicado en atentado contra las Torres Gemelas en 1993. No obstante, Chertoff matizó: "Debido a que la investigación está en curso, no podemos formarnos una conclusión definitiva".

El fiscal general Gonzales aseguró que la trama hubiera "asesinado potencialmente a cientos de personas inocentes". El director del FBI también apuntó hacia la organización de Osama Bin Laden: "Tiene toda la pinta de un compló de Al Qaeda". La inminente amenaza era "de lo más complejo que hemos visto recientemente en cuanto a terrorismo se refiere", aseguró Chertoff.

Unos carteles informan en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York de la prohibición de embarcar con líquidos.
Unos carteles informan en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York de la prohibición de embarcar con líquidos.ASSOCIATED PRESS

La marca de Bin Laden

Varios expertos en terrorismo consultados por la agencia France Presse coinciden en señalar que el plan terrorista desarticulado ayer lleva el sello de Al Qaeda y de Osama Bin Laden. Sólo existe un precedente, el llamado Plan Bojinka, que en 1995 pretendía hacer explotar de forma simultánea 12 aviones comerciales en ruta entre Asia y Estados Unidos. El proyecto fue atribuido a Ramsi Ahmed Yusef, implicado en los atentados de Al Qaeda contra las Torres Gemelas de Nueva York en 1993.

Bob Ayers, experto del instituto londinense Chatham House, se muestra sorprendido por el número de objetivos. "Estamos hablando de una decena de aparatos. Que accedan grupos terroristas a tantos aviones y provoquen explosiones simultáneas requiere una organización enorme". La magnitud de este plan es lo que ha permitido descubrirlo a tiempo, aseguran otros analistas.

Paul Wilkinson, de la Universidad de Saint Andrews (Escocia), opina también que la conspiración es "realmente muy ambiciosa; es el tipo de ataques espectaculares que la red Al Qaeda desea realizar". Michael Clarke, del King's College de Londres, ve lógica esa estrategia. "Saben desde el 11 de septiembre que no pueden secuestrar aviones, porque los pasajeros van a reaccionar. Secuestrar un avión no es realista, pero derribarlo por una explosión sí lo es".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Yolanda Monge
Desde 1998, ha contado para EL PAÍS, desde la redacción de Internacional en Madrid o sobre el terreno como enviada especial, algunos de los acontecimientos que fueron primera plana en el mundo, ya fuera la guerra de los Balcanes o la invasión norteamericana de Irak, entre otros. En la actualidad, es corresponsal en Washington.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_