Movilización policial contra los pirómanos

Cien policías antidisturbios y otros tantos guardias civiles se sumarán en las próximas horas a la operación contra los pirómanos en Galicia, mientras que las Fuerzas Armadas movilizarán hasta 1.200 soldados en el marco de la Operación Bruxa para misiones de vigilancia. Un despliegue de medios terrestres y aéreos sin precedentes en España, según el Gobierno, para combatir casi un centenar de fuegos, de los que la mitad seguían "fuera de control".

Ayer ingresó en prisión uno de los cuatro detenidos en los dos últimos días por su presunta implicación en los incendios. Es una persona de 59 años, vecino de Santiago de Compostela.

La alarma social causada por los incendios forestales ha llevado a las fuerzas de seguridad del Estado a movilizar más efectivos. El Cuerpo Nacional de Policía tiene en alerta a sus 2.000 agentes en Galicia y ayer "estaban en camino" unos 100 funcionarios de las Unidades de Intervención Policial (UIP), conocidos como antidisturbios. Estos agentes se dedicarán preferentemente a controles móviles en carreteras y caminos para identificar y cachear a sospechosos. El jefe superior de Policía de Galicia, el comisario Luis García Mañá, se encargará de coordinar este despliegue.

Las Fuerzas Armadas movilizan hasta 1.200 soldados en la Operación Bruxa para tareas de vigilancia y apoyo

Ingresa en prisión uno de los cinco detenidos en los últimos días por su supuesta relación con fuegos provocados

100 antidisturbios y otros 100 guardias civiles se incorporarán en las próximas horas a la búsqueda de sospechosos

Por su parte, la Guardia Civil trasladará a Galicia a unos 30 agentes de la Agrupación Rural de Seguridad, otros tantos del Escuadrón de Caballería, y la dotación de un helicóptero. Estos guardias se sumarán a los 109 que ya hay sobre el terreno (89 de los equipos de Información de Policía Judicial, 15 de los Equipos contra el Crimen Organizado y cinco de la Unidad Central Operativa desplazados desde Madrid). Dichos agentes han recibido orden de volcarse en la lucha contra los pirómanos y aparcar de momento otras investigaciones.

Implacables con los autores

El director general de la Guardia Civil, Joan Mesquida, se desplazó ayer A Coruña, donde se reunió con los responsables de la investigación de incendios en las cuatro comandancias de Galicia y aseguró que el instituto armado será "implacable" con los autores de estos hechos criminales.

También los especialistas antiincendios del Cuerpo Nacional de Policía adscritos a la Xunta de Galicia (conocidos popularmente como policía autonómica) están volcados en la captación de información que pudiera conducir a la identificación y detención de los pirómanos.

Por su parte, las Fuerzas Armadas movilizarán hasta 1.200 soldados en el marco de la llamada Operación Bruxa. Está previsto que hoy se desplieguen en Galicia 50 patrullas, que aumentarán hasta 140 mañana, además de otras 35 de reserva. En esta primera fase serán 630 militares, dotados con 175 vehículos y maquinas de ingenieros, los que se dedicarán a tareas de vigilancia y apoyo a los especialistas en la extinción de incendios; por ejemplo, mediante la apertura de cortafuegos. Aunque muchos de estos militares proceden de unidades basadas en Galicia (como la Brigada de Infantería Ligera Aerotransportable), el jefe del mando de Operaciones, Bernardo Álvarez del Manzano, coordinaba ayer la movilización de medios procedentes de los tres ejércitos y distintas partes de España.

Tras la reunión celebrada el lunes en La Moncloa, el subsecretario de Interior, Justo Zambrana, acudió ayer a la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra para coordinar los apoyos prestados por la Administración central. El Nivel 2 de alerta, declarado en las provincias de A Coruña y Pontevedra, implica que la Xunta dirige la lucha contra el fuego con el apoyo de medios del Estado, de otras comunidades autónomas (Madrid, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y Asturias, entre otras) e incluso gobiernos extranjeros, como el italiano, que ayer anunció el envió de dos aviones Canadair. También Portugal colabora con 66 trabajadores y 20 vehículos, pese a sufrir ella misma el azote de los incendios forestales.

Las pesquisas se han saldado hasta el momento con la detención de cuatro personas: en Santiago de Compostela, Lalín, Soutomaior (Pontevedra), A Baña (A Coruña). El primero, José A. R., de 59 años, ingresó a primeras horas de la tarde de ayer en prisión por orden judicial, tras ser reconocido por varios testigos como supuesto causante de "varios incendios", según fuentes policiales.

Visto con un mechero

José A. R., residente en el barrio compostelano de San Lorenzo, fue visto con un mechero cerca de la ladera del monte Pedroso (el llamado pulmón verde de Santiago), donde se han registrado varios fuegos desde el pasado día 4. Los investigadores le relacionan con este incendio y con otros en la Toxeira de San Lorenzo y Rueiro.

El supuesto pirómano, que fue arrestado en su domicilio, solía deambular acompañado de varios perros y sus vecinos le califican de "hombre solitario e introvertido". En principio, se descarta el móvil económico y todo apunta a algún desequilibrio psicológico, según fuentes policiales.

Álvaro García Ortega, fiscal de medio Ambiente de Galicia, pidió ayer el ingreso en prisión de J. A. R. en base a su "peligrosidad", pues se le atribuyen incendios muy cerca de núcleos habitados. El médico forense sometió a unas pruebas al detenido, que ha estado en tratamiento contra el alcoholismo, y determinó que tiene capacidad de discernimiento.

Según fuentes judiciales, los vecinos de José A. R. han comentado que llevaba años ocasionando incendios, aunque hasta ahora no lo habían denunciado ni tenía antecedentes por este tipo de delitos. Por eso, las autoridades hacen constantes llamamientos a la colaboración ciudadana.

Un hidroavión que formaba parte del dispositivo contra el fuego cayó ayer al mar cerca de la playa de Raxó, en el municipio pontevedrés de Poio, sin que hubiera que lamentar víctimas. En cambio, dos personas, una en Santiago y otra en Vigo, sufrieron quemaduras cuando participaban en labores de extinción.

La ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, aseguró ayer que el 35% de los medios de su departamento está desplegado en Galicia, donde operan 22 aeronaves y cuatro brigadas, pero advirtió de que no podía hacer mucho más porque "hay riesgo alto en toda España".