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Ola de calor

Sanidad recomienda beber 2,5 litros de agua al día y evitar la exposición al sol

La mejor manera de no sufrir los estragos de la ola de calor es mantenerse lo más alejado posible de ella. En eso coinciden las recomendaciones del Ministerio de Sanidad y, en general, todos los médicos. "Los más vulnerables son los niños pequeños y los ancianos", explica la doctora Sara Fabra, del Centro de Salud de Fuencarral, con experiencia en el servicio de urgencias. Los niños corren más riesgo porque tienden a deshidratarse con rapidez. Los ancianos suelen perder la sensación de sed y, por ello, a no tomar suficientes líquidos.

Otros que corren riesgo son los trabajadores que, por las características de su actividad, permanecen largos periodos expuestos a los rayos solares. Es el caso, por ejemplo, de los albañiles y los agricultores. "Es imprescindible que las empresas contemplen medidas de protección y de hidratación adecuadas", recomendó ayer la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria, según informa Europa Press.

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Mareos, sudoración excesiva, sensación de malestar. Esos son, de acuerdo con Sara Fabra, los primeros síntomas que presenta una persona afectada por el calor. El gran peligro es que derive en una hipertermia o golpe de calor, que ocurre cuando el cuerpo pierde el control de su temperatura, que puede elevarse por encima de los 40 grados en poco tiempo. Si no se trata a tiempo, el golpe de calor es mortal.

Recomendaciones

"Lo mejor es mantenerse resguardado del sol y beber entre dos y dos litros y medio de agua al día. Hay que beber continuamente, poco a poco", recomienda la doctora Fabra. Asimismo, aconseja evitar los cambios bruscos de temperatura, como los que ocurren cuando se pasa de un ambiente climatizado al exterior. Tampoco es aconsejable realizar actividades físicas intensas durante las horas de más calor.

Sanidad también aconseja permanecer el mayor tiempo posible bajo sombra o en ambientes con aire acondicionado y usar ropa de colores claros, ligera y que permita la transpiración. Y recomienda mantener las medicinas lejos del calor, porque éste puede afectar su composición y efecto.

Los españoles se han tomado en serio el calor y las recomendaciones, a juzgar por las ventas de refrescos, aguas y bebidas hidratantes, que se han disparado, incluso para los estándares del verano. El lunes 17 de julio de 2006, fue uno de los días históricos de mayor venta de los productos de Coca Cola España, según una portavoz de la empresa. Ese día, en Madrid se registró una máxima de 36 grados y en Sevilla, 40grados, y las ventas de refrescos, agua embotellada y bebidas hidratantes de la empresa crecieron un 24% respecto al mismo día del año anterior, cuando los termómetros registraron 34 grados de máxima en Madrid y 33 grados en Sevilla.

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