_
_
_
_
Entrevista:INMACULADA GONZÁLEZ PUY | Directora del Instituto Cervantes de Pekín

"Prevemos una afluencia masiva de estudiantes de español"

Inmaculada González Puy siempre quiso estudiar chino. Apenas tenía 17 años, cuando se puso a trabajar en un restaurante de comida asiática en su Barcelona natal, y decidió que la mejor manera de aprender el idioma era ir a Taiwan. Viajó a la isla y a Pekín varios veranos, a partir de 1977, mientras cursaba Historia en la Universidad de Barcelona. Hasta que en 1983 se instaló en la capital china para trabajar en la Embajada española. Hoy, a los 47 años, González Puy es la directora del Instituto Cervantes de Pekín, el mayor de los 58 centros que el organismo tiene en 38 países, y que será inaugurado mañana por los Príncipes de Asturias.

"Cuando vine a Pekín la primera vez en 1979 [tres años después de la muerte de Mao Zedong], los estudiantes extranjeros vivíamos en un gueto, y no podías relacionarte con los chinos. Así que decidí que vendría a trabajar". En 1983, aterrizó en la capital para integrarse en la legación española. "Yo era la única que hablaba chino, traducía los artículos del Diario del Pueblo para el embajador", cuenta González Puy, que está casada con un popular músico chino desde hace 20 años.

"Este curso quisieron matricularse 400 alumnos de español en la Universidad de Lenguas Extranjeras de Pekín, pero sólo aceptaron a 44"
"El Cervantes va a suponer el despegue definitivo del español. Más adelante habrá que pensar en abrir una filial en alguna universidad de Pekín"

Eran tiempos de grandes cambios en el país asiático. Deng Xiaoping había lanzado el proceso de apertura y reforma, que conduciría al progresivo abandono de la economía planificada y a la construcción del país capitalista que es China hoy.

El Pequeño Timonel había iniciado el camino de internacionalización. Pero pocos hablaban entonces español en China. La enseñanza del idioma de Cervantes se había impartido en los años sesenta y setenta en las escuelas, pero fue posteriormente interrumpida.

La situación ha evolucionado, especialmente en los últimos años. Pero el español sigue en una posición muy atrasada respecto a otros idiomas. "Actualmente, se enseña en unas 20 facultades y departamentos universitarios de una docena de provincias y municipalidades, en seis escuelas secundarias de todo el país y en algunas academias privadas. Pero hay una gran demanda a la cual no se puede dar salida", asegura González Puy.

La directora del instituto pequinés calcula que, en total, estudian español en China unos 5.500 alumnos, casi cuatro veces más que los 1.500 de hace cinco años, pero muy lejos de los 40.000 que aprenden francés [la Alianza Francesa está presente en ocho ciudades] o los 25.000 que estudian alemán.

Y pone un ejemplo: "Este curso, quisieron matricularse 400 alumnos de español en la Universidad de Lenguas Extranjeras de Pekín (Beiwai), pero sólo aceptaron a 44. Es decir, casi el 90% de la demanda no fue satisfecha. No hay donde estudiar, no hay profesores, no hay gente formada, no hay intérpretes, no hay guías de turismo".

La llegada del Cervantes cambiará esta situación, asegura González Puy. "Va suponer el despegue definitivo del español". El instituto pequinés será el más grande de la institución. Ocupa cuatro plantas, con un total de 3.000 metros cuadrados, en un edificio de seis plantas. Está situado en las inmediaciones del Estadio de los Trabajadores, en uno de los barrios de Pekín de mayor presencia extranjera, y a un centenar de metros de un popular mercado callejero y de la Alianza Francesa, el único otro centro extranjero de este tipo, además del Cervantes, autorizado hasta la fecha por el Gobierno chino.

Aunque la intención de abrir un Cervantes en Pekín se remonta a la anterior legislatura, el proyecto se fue retrasando, entre otras razones, por la reticencia de las autoridades chinas. La prioridad otorgada por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero a China y el creciente interés de Pekín por Latinoamérica dieron un impulso definitivo a la iniciativa. El acuerdo definitivo fue rubricado durante el viaje del presidente chino, Hu Jintao, a España, en noviembre del año pasado. "Las visitas cruzadas de los dos presidentes fueron claves", afirma González Puy.

El centro cuenta con 20 aulas, que tendrán entre 10 y 12 alumnos. Pagarán una media de 20 yuanes (dos euros) por hora. También habrá clases para empleados de empresas y para niños, y cursos de formación para los profesores chinos de español. Además, el centro dispone de salón de actos, sala de exposiciones y biblioteca, y contará con un amplio programa de actividades culturales.

"Prevemos una afluencia masiva de estudiantes, más adelante habrá que pensar en abrir una filial en alguna de las universidades de Pekín", afirma. El Cervantes tiene la intención de contar con tres o cuatro centros en China, el segundo de ellos, a partir del año que viene, en Shanghai.

La inversión para la apertura del instituto pequinés ha ascendido a unos dos millones de euros. Tendrá un presupuesto oficial para 2007 de dos millones de euros, a los que habrá que sumar los ingresos por los pagos de las clases de los alumnos y los patrocinios de las empresas. El objetivo es que el 30% del presupuesto total corresponda a autofinanciación.

Inmaculada González Puy.
Inmaculada González Puy.SIMON LIM

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_