Ligera confusión
Los inversores europeos vivían ayer una situación un tanto confusa en la que la sensación de trabajar sin presiones externas se cruzaba, y anulaba, con la ausencia de dirección. La razón estaba en que la Bolsa de Nueva York permanecerá cerrada día y medio por la festividad del 4 de julio. El medio día de fiesta se celebró ayer y los mercados de valores europeos lo superaron con aprobado.
El Ibex 35 cerró con un avance del 0,19% después de mantenerse a la baja durante casi toda la sesión. Los inversores españoles tuvieron sus propios momentos de confusión ante los numerosos dividendos que se empezaron a pagar ayer mismo y que distorsionan la percepción sobre los precios durante algunos minutos. El Ibex Medium ganó el 1,13% y el Ibex Small Caps el 0,43%. La mayor debilidad del Ibex 35 se debió a los problemas del Banco SCH y Telefónica para unirse a los avances casi hasta última hora.
Las operaciones de "lavado de cupón" cobraron un protagonismo inesperado al elevar el volumen del negocio del Mercado Continuo hasta los 6.438,90 millones de euros, uno de los más altos de este año. Entre esas operaciones destacaron los 208,60 millones de acciones del BBVA, el 6,15% del capital social, por un total de 3.366,58 millones de euros. Las operaciones "abiertas" descendieron respecto del pasado viernes, hasta quedar en 2.270,02 millones de euros.
Entre los indicadores económicos del día destacó el descenso de una décima, hasta el 7,9%, en la tasa de paro de la eurozona. Los indicadores estadounidenses insistieron en mostrar el lado débil de aquella economía, con un descenso de 0,6 puntos en el índice ISM de actividad manufacturera en junio y un recorte en los gastos en construcción en el mes de mayo. Sin embargo, se impuso el ambiente festivo y los mercados estadounidenses cerraron con discretos avances.
