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La Comisión Europea quiere acabar con los excedentes de vino

Ana Carbajosa

La Comisión Europea pretende acabar con los cientos de miles de hectolitros de vino de mala calidad producidos en la UE y que terminan convertidos en licor o en alcoholes para la industria. Ése es uno de los objetivos de la propuesta que el Ejecutivo comunitario presentará hoy para reformar la Organización Común de Mercado (OCM) del vino y que plantea la destrucción de hasta 400.000 hectáreas de viñedos europeos en cinco años. Por las hectáreas destruidas, los productores recibirían a cambio incentivos para que abandonen la actividad.

España, tercer productor de la UE, con 39 millones de hectolitros, será uno de los afectados por la reforma. Este año, los productores españoles han solicitado ayudas para destilar 300.000 hectolitros de vino. Una petición que será analizada este viernes por un comité comunitario.

De los cerca de 1.300 millones que la UE gastó el año pasado en subvenciones, unos 500 se dedican a la destilación y a las ayudas para el almacenaje. Estos subsidios, contemplados inicialmente para situaciones de crisis, se han convertido en una forma de dar salida a los excedentes. Cerca de un 9% del vino que se produce en territorio comunitario es excedentario.

"La idea es reducir la producción y mejorar la competitividad", explican fuentes comunitarias. La UE aduce, además, motivos de salud pública para reformar el sector. A Bruselas le preocupa que los subsidios bajen el precio de los licores, de alto contenido alcohólico.

Estos cambios se producirían sin que se altere el volumen de ayudas que Bruselas concede anualmente al sector. El texto, en cualquier caso, es sólo una propuesta. El texto legal llegará, en principio, al Consejo de Ministros de la UE a finales de 2006, para que se ponga en marcha en 2008.

La UE es el mayor productor y consumidor de vino del mundo, pero los incentivos para el abandono de los viñedos han producido un gran descenso de las hectáreas cultivadas. Los 4,5 millones de hectáreas de viñedo de 1976 se han quedado en 3,2 millones en 2005. La liberalización del mercado que propone la Comisión acabaría con medidas como la prohibición de plantar viñedos o las de reconversión.

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Sobre la firma

Ana Carbajosa
Periodista especializada en información internacional, fue corresponsal en Berlín, Jerusalén y Bruselas. Es autora de varios libros, el último sobre el Reino Unido post Brexit, ‘Una isla a la deriva’ (2023). Ahora dirige la sección de desarrollo de EL PAÍS, Planeta Futuro.

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