Fernando Trueba selecciona lo mejor de Paquito d'Rivera
El disco reúne 14 temas grabados en los ochenta en Nueva York
"La película Calle 54 empieza con mi voz diciendo: 'Un amigo me regaló una vez un disco que me complicó la vida'. Ese disco era Blowin, y ese músico se llamaba Paquito d'Rivera". Fernando Trueba, cineasta, melómano apasionado, autor de Calle 54, es el responsable de Paquito para los amigos, una selección de 14 grabaciones realizadas por el músico cubano en los años ochenta que promete emociones fuertes.
Extraño caso el de estos dos "amigos inseparables" a los que no hay modo de reunir, ni aun tratándose de la presentación del CD que, por vez primera, une sus nombres en una portada. Sin embargo, un primer ejemplar de Paquito para los amigos terminó llegando a las manos del músico. "Quedó bonito, los dibujos de Mariscal y la selección... Bueno, Fernando me conoce mejor que yo mismo. Aunque yo no sé nada del disco, ni de lo que hizo ni por qué. Seguramente, fue porque sí, porque ama la música y porque yo significo algo para él. Debe ser por eso", contó el músico durante su paso por Madrid.
Claudia, original de Chucho Valdés; Brussels in the rain, dedicada por Paquito al legendario armonicista belga Toos Thielemans; una versión de Tico Tico, de Abreu y Oliveira, y un impagable Summertime son algunas de las interpretaciones que Trueba ha seleccionado para ser incluidas en el disco, que no se circunscribe a un estilo determinado, sino que abarca desde el latin-jazz al tango, la música brasileña y el folclor de varios países latinoamericanos. Además de Paquito, en el álbum intervienen músicos como Michel Camilo, Arturo Sandoval, Danilo Pérez, el trompetista brasileño Claudio Roditi y el percusionista Manolo Badrena. "Paquito para los amigos es un disco que tenía hecho para mí, para llevarlo en el coche, con mis interpretaciones favoritas. La selección es muy de esa época en que yo descubro a Paquito, los años ochenta. Es la llegada de Paquito a Nueva York y la irrupción de él y de los marielitos en aquel ambiente de jazzistas, que fue un momento de enorme riqueza", aclara Trueba.
Paquito para los amigos es el tercero de la serie iniciada con Música para los amigos y Música para machacarte el corazón, y el primero que Trueba dedica monográficamente a un solo músico. "Es un disco para disfrutarlo. No he querido ni que sea representativo de Paquito ni abarcar todas las épocas. Por decirlo de algún modo, es 'mi Paquito". Tanto monta, monta tanto: lo que Paquito es a Fernando, lo es Fernando a Paquito. "Fernando es alguien muy especial en mi vida. Le conocí a través de Nat Chediak, el director del Festival de Cine de Miami, y no puedo sino estar encantado de cómo se ha liado con mi vida artística y personal, aunque sólo fuera por la publicidad que me ha hecho", añade Paquito.
Rincones oscuros
Pero incluso en la mejor de las amistades existen los rincones oscuros, según recuerda el jazzista cubano. "Estábamos rodando Calle 54 y, de repente, me dice: 'Paquito, se me ha ocurrido empezar la escena contigo sacando el coche del garaje'. Sólo que era pleno invierno y no me dejó subir la capota. Al final estaba todo el vecindario contemplando el espectáculo. Y yo, que casi muero". La escena se concluyó sin mayores daños para el músico que pudo grabar su muy memorable suite Panamericana en la película. Algo de lo que el cineasta se muestra particularmente orgulloso: "Paquito es uno de esos grandes músicos que tiene un sonido propio y reconocible, como Paul Desmond o John Coltrane; y es algo que te engancha y sientes la necesidad y las ganas de oírle".
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