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El Congreso conmemora la II República con la oposición del PP

PSOE e IU admiten que el periodo histórico tuvo "defectos y virtudes"

Carlos E. Cué

La II República, proclamada el 14 de abril de 1931 y desaparecida tras la Guerra Civil y la victoria del dictador Francisco Franco, recibió ayer el primer homenaje oficial del Congreso de los Diputados. Todos los grupos, salvo el PP, que se opuso, y ERC, que se abstuvo, apoyaron una proposición de ley de IU-ICV que declara 2006 Año de la Memoria Histórica y reivindica este periodo como "el primer régimen realmente democrático" de España.

Incluso en el año en que se cumplen 75 de su nacimiento, la II República española, pese a la brevedad de su recorrido, sigue despertando pasiones encontradas en el Congreso. Ni siquiera fue posible consensuar en la Cámara un escueto reconocimiento a su tarea y la declaración de 2006 como Año de la Memoria Histórica.

El PSOE, en el intento de matizar las posiciones más extremas de IU-ICV, había negociado una enmienda transaccional. El socialista Ramón Jáuregui había convencido al comunista Gaspar Llamazares para que aceptara un texto en el que se reivindicaba la II República "con todos sus defectos y sus virtudes" como "la más importante experiencia democrática" anterior a la Constitución de 1978.

Jáuregui envió ese texto al PP el lunes pasado, pero el principal partido de la oposición no sólo lo rechazó, sino que utilizó la prerrogativa de cualquier grupo para impedir que se tramiten transaccionales y logró que no se pudiera votar. De manera que lo que se aprobó ayer, con 172 votos a favor, 131 en contra y 4 abstenciones -las de ERC, que considera el texto poco ambicioso-, fue la propuesta de IU-ICV con dos enmiendas del PSOE y una de CiU.

Jáuregui anunció que, ante el acto de "filibusterismo parlamentario" del PP, los socialistas llevarán al Senado, con bastantes probabilidades de éxito, el texto pactado con Llamazares y que implicaba un reconocimiento del "legado histórico" de la II República "con todos sus defectos y sus virtudes". Sin embargo, esto retrasará la tramitación de la norma, que tendrá que volver al Congreso con esas modificaciones. Además, se acerca el verano, de manera que, cuando se apruebe definitivamente la declaración de 2006 como Año de la Memoria Histórica, probablemente ya estará muy cercano el 2007. Claro que antes, en este periodo de sesiones, el Gobierno se ha comprometido a presentar una Ley de Memoria Histórica y compensación a las víctimas del franquismo y de la Guerra Civil mucho más relevante para las asociaciones de represaliados que esta declaración que se aprobó ayer.

En realidad, lo que se votó, como ocurre con frecuencia en esta legislatura, donde los pactos a varias bandas son imprescindibles para aprobar cualquier reforma, es una mezcla de ideas poco coherentes. Por una parte, la exposición de motivos de IU-ICV que señala, por ejemplo: "El régimen instaurado en 1931 es un antecedente directo del actual Estado social y democrático de Derecho y del sistema autonómico establecido por la Constitución de 1978". Pero a la vez, el articulado, establecido por las enmiendas del PSOE, se olvida de la II República y sólo reivindica a los "hombres y mujeres que fueron víctimas de la Guerra Civil y posteriormente de la represión franquista". El entuerto quedará resuelto, previsiblemente, en el Senado.

La proposición también insta al Gobierno a promover actos conmemorativos y a la Real Fábrica de Moneda y Timbre a emitir sellos de homenaje. Jáuregui, muy enfadado por el veto del PP a la enmienda transaccional, aseguró que la Transición confundió "perdón con olvido". El portavoz socialista está convencido de que España está preparada para mirar a su pasado con justicia sin reabrir heridas y prometió que él no va a permitir que "cambien la historia cuatro revisionistas de pacotilla" que están, dijo, influyendo en el Partido Popular.

Manuel Atencia, el portavoz del PP, reiteró la doctrina de su partido según la cual no hay que remover en el pasado salvo para reivindicar la Transición y la reconciliación. "La II República es historia y como tal debe ser tratada", insistió. Atencia se quejó de que el presidente, José Luis Rodríguez Zapatero, "se declare heredero de la II República, en lugar de sentirse heredero de Felipe González o Alfonso Guerra".

Llamazares sostuvo también que nadie quiere reabrir heridas, sino reconocer a la II República "con sus luces y sus sombras" como antecedente democrático, y pidió al PP que sea heredero de UCD y no del franquismo. Atencia asintió, porque estuvo en la UCD, pero rechazó la propuesta y más tarde aseguró que no se puede plantear la II República como antecedente de la Constitución.

Los diputados de IU-ICV aplauden la aprobación de su proposición de ley.
Los diputados de IU-ICV aplauden la aprobación de su proposición de ley.EFE

La propuesta de consenso

La enmienda del PSOE, que previsiblemente será aprobada en el Senado, pretende lograr el consenso político. Lo que sigue es un extracto: "En el 75º aniversario de su proclamación, esta ley pretende recordar también el legado histórico de la II República. Aquella etapa de nuestra historia constituyó el antecedente más inmediato y la más importante experiencia democrática que podemos contemplar al mirar nuestro pasado y, desde esa perspectiva, es necesario recordar, con todos sus defectos y virtudes, con toda su complejidad y su trágico desenlace, buena parte de los valores y principios políticos y sociales que presidieron ese periodo y que se han hecho realidad en nuestro actual Estado social y democrático de derecho, pero sobre todo a los hombres y mujeres que defendieron esos valores. El esfuerzo de todos ellos culminó en la Constitución de 1978, que nos ha llevado a disfrutar del periodo democrático más estable de la historia de nuestro país".

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