Una adolescente recibe un trasplante de corazón y pulmones en Barcelona

Un equipo formado por cerca de medio centenar de médicos de la unidad pediátrica del hospital Vall d'Hebron de Barcelona realizó con éxito el pasado viernes un trasplante de corazón y pulmones a una niña de 16 años guineana que sufría fallo cardiaco e hipertensión pulmonar a causa de una infección parasitaria conocida como esquistosomiasis. En España se han efectuado trasplantes cardiopulmonares a pacientes adolescentes en sólo tres ocasiones. El hospital Vall d'Hebron pondrá en marcha el primer programa de este tipo de trasplante destinado sólo a niños.

La intervención, que se prolongó durante más de seis horas, exigió la participación de una cincuentena de médicos, de los servicios de cirugía cardiaca infantil, de neumología pediátrica y de cardiología pediátrica, entre otras.

La adolescente pesaba tan solo 33 kilos y, según los médicos, no habría sobrevivido más de seis meses si no hubiera sido sometida a un trasplante de corazón y pulmones, órganos que tenía seriamente lesionados a consecuencia de una infección por esquistosoma, "un parásito que deposita sus huevos en los vasos sanguíneos y provoca que éstos se obstruyan", explicó ayer el doctor Antonio Moreno, del servicio de neumología infantil del hospital barcelonés.

Esta infección puede tratarse con fármacos, pero si no se hace a tiempo pueden aparecer secuelas, como le sucedió a la adolescente guineana. "El diámetro de los vasos pulmonares se había reducido e impedía un flujo normal de la sangre, lo que obligaba al ventrículo derecho del corazón a trabajar de manera forzada. La infección había dañado también el lado izquierdo del corazón", explicó el doctor Moreno.

La niña acudió a España por primera vez cuando tenía 12 años gracias a una ONG. Sufría arritmias y cansancio y los médicos del Vall d'Hebron le diagnosticaron entonces la infección por esquistosomiasis. La pequeña recibió el tratamiento farmacológico correspondiente, pero su estado se agravó cuando regresó a su país. Una familia barcelonesa facilitó su retorno a la capital catalana, acompañada de su madre, para que recibiera de nuevo asistencia médica. "En los últimos meses, la niña ingresaba casi cada semana a causa de las arritmias cardiacas que sufría. La gravedad de su estado nos obligó a ponerla en lista de espera para someterla a trasplante de corazón y pulmones", recordaba ayer el neumólogo Antonio Moreno.

El hospital maternoinfantil de Vall d'Hebron dispuso el pasado viernes de los órganos que la niña guineana necesitaba, donados por la familia de un niño fallecido aquel mismo día. Los médicos extrajeron los órganos dañados de la paciente por separado y le trasplantaron en la cavidad torácica el "bloque" formado por el corazón y los pulmones del donante, explicó Moreno.

La niña se encontraba ayer en la Unidad de Cuidados Intensivos del Vall d'Hebron, donde deberá permanecer varias semanas. Si no aparecen complicaciones (rechazo de los órganos donados o infecciones), será dada de alta dentro de unas semanas y en unos meses "podrá llevar una vida normal".

El Hospital Vall d'Hebron lleva años preparándose para poner en marcha el primer programa de España de trasplante cardiopulmonar infantil. El centro ha dado por inaugurado este programa tras el éxito de esta intervención, ya que a pesar de que la paciente tiene 16 años, su peso y tamaño son propios de una niña de menor edad.