2.000 personas exigen paralizar la incineradora de Txingudi

Unas 2.000 personas, según cálculos de los organizadores, participaron ayer en una manifestación para reclamar la paralización del proyecto de abrir una incineradora en la comarca del Bidasoa y demandar a las instituciones que analicen otras soluciones "más ecológicas" para el tratamiento de las basuras en Guipúzcoa. La marcha comenzó frente al Ayuntamiento de Hendaya -este municipio francés también trasladará sus residuos a la planta de Txingudi- y concluyó junto al edificio consistorial de Irún. Tomaron parte representantes de grupos ecologistas, plataformas contra la incineración y una delegación de vecinos de Rentería afectados por el vertedero de San Marcos.

Al término de la misma, los promotores leyeron un comunicado en el que hacen un llamamiento a los responsables políticos a estudiar soluciones "verdaderas y duraderas", en lugar de apostar por la incineración. "Sí a nuevas instalaciones, pero que sean plantas que convierten materia orgánica en compost y permiten reciclar y reutilizar todo lo que es susceptible de volver a ponerse en uso", reza el texto.

Finalmente, emplazaron a los alcaldes de Irún, Hondarribia y Hendaya a paralizar el proyecto de la planta porque, de lo contrario, "cada día van a encontrar más oposición ciudadana" y van a pagar "un coste político".

Manifiesto en prensa

Por otro lado, el diputado general de Guipúzcoa, Joxe Joan González de Txabarri, considera que ha llegado "la hora de las soluciones" para resolver el "grave problema" de las basuras en esta provincia. Reclama actuar con responsabilidad y apela a la "lealtad y la colaboración interinstitucional" para alcanzar acuerdos que saquen a Guipúzcoa de la "encrucijada" en la que se encuentra.

Este llamamiento público de Txabarri figura en el Decálogo para una solución al problema de las basuras, que ayer fue insertado en una página completa de publicidad en los siete diarios con difusión en esta provincia.

Valora además la "nueva actitud" del alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, quien recientemente anunció su disposición a acatar la construcción de una incineradora en San Sebastián. Este paso permite, en opinión de Txabarri, "recuperar la vía del consenso y situar el problema en condiciones objetivas que hacen posible su solución". Por ello, la Diputación se compromete a "respetar y acatar" la decisión que el Ayuntamiento donostiarra adopte sobre la ubicación de la planta en su término.

El mandatario guipuzcoano hace una defensa de los objetivos del plan de gestión de residuos de la provincia, que apuestan por reducir la generación de basuras, aumentar el reciclaje y el compostaje, eliminar el vertido y, al final del proceso, por la "valorización energética a través de la incineración" de los residuos que "no hayan podido ser reciclados o compostados".