El 60% de las mujeres mayores de 16 años carece de un puesto de trabajo en Euskadi

La discriminación de las mujeres en el mercado laboral vasco se agravó en 2005, ya que sólo cuatro de cada diez mayores de 16 años tiene un puesto de trabajo. Además, les afectan más la precarización y la temporalidad y no se han podido beneficiar aún de la ley de Igualdad, aprobada hace un año, según destacó ayer la responsable de la Secretaria de la Mujer de CC OO de Euskadi, Felisa Piedra. El sindicato ha elaborado con datos públicos un informe sociolaboral sobre la situación de las vascas. Distintas movilizaciones reivindican hoy, Día Internacional de la Mujer, la igualdad de sexos.

La tasa de actividad de las mujeres vascas se redujo el año pasado un 0,6% hasta situarse en el 47,85%, 20 puntos por debajo de la masculina, algo superior a la media española, pero aún 13,5 puntos por debajo del índice europeo, según el informe de CCOO. El sindicato ha utilizado datos de la EPA (Encuesta de Población Activa, del Instituto Nacional de Estadística) y de la PRA (Encuesta de Población en Relación con la Actividad, que elabora el Eustat) para concluir que se está acentuando la precarización laboral femenina.

Sólo cuatro de cada 10 mujeres mayores de 16 años trabajan en el País Vasco; su tasa de temporalidad se halla diez puntos por encima de la de los hombres y cobran un 26% menos en igual puesto, pese a que las trabajadoras poseen mayor nivel de estudios general que los hombres.

Un reciente informe de Emakunde, realizado por la UPV, concluía que los hombres cobran de media entre 3.000 y 10.000 euros anuales más que las mujeres por el mismo trabajo, según la franja de edad que se compare. Las mayores diferencias se dan en el sector servicios, en el que trabajan nueve de cada diez mujeres, y entre las personas mayores de 50 años empleadas en el sector industrial, en particular.

El informe de CCOO constata que un 52,2% de los 14.100 nuevos asalariados extranjeros del País Vasco fueron el año pasado mujeres inmigrantes, que representaron casi un tercio del incremento en el número de trabajadoras. El paro sigue afectando más a las mujeres, que ya representan el 57% de los desempleados registrados, y, además, engrosan, las listas de los parados de larga duración. Tres de cada diez desempleadas llevan más de un año en esa situación.

Para acabar con esa discriminación, el sindicato propone incorporar a un mayor número de mujeres a la actividad laboral, especialmente en los sectores en que están infravaloradas, aplicar medidas que faciliten la conciliación de la vida familiar y laboral, "aumentar la calidad del empleo de las mujeres, asimilar la nueva mano de obra inmigrante femenina y reducir la brecha salarial".

Piedra instó además al Gobierno autónomo a desarrollar la ley de Igualdad, aprobada hace ahora un año, y pidió al Ejecutivo que articule medidas que obliguen a la patronal a aplicar dicha ley en sus empresas, ya que "se siguen resistiendo y cada vez tienen más prejuicios" a la contratación de mujeres.

Comisiones confió en que el anteproyecto de ley elaborado por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero mejore la norma vasca, "puesto que está redactada desde el diálogo social" del Ejecutivo central con sindicatos y empresarios, algo que reprobó que no se haya hecho en el caso vasco. "Tenemos igualdad formal, ante la ley, pero no la real. Por eso son necesarias medidas efectivas que a través de la negociación colectiva acaben con las discriminaciones", dijo Piedra.

Todos los partidos y las principales instituciones hicieron ayer públicos comunicados en favor de la igualdad y defendieron la mejora de la situación real de las mujeres y hoy celebrarán actos por este motivo. Diversas marchas y concentraciones organizadas por asociaciones de mujeres conmemorarán el 8 de marzo en distintos puntos de Euskadi.

También han convocado diversos actos los sindicatos. CC OO se concentra ante la sede de Confebask en Bilbao y los sindicatos nacionalistas frente a las diputaciones. UGT homenajeará a varias personas por su labor en favor de la igualdad.