_
_
_
_
_
La polémica de los estudios y sondeos

Nadal no descarta que aparezcan más encuestas

El portavoz del Gobierno catalán, el socialista Joaquim Nadal, calificó ayer de "insólito" que el Ejecutivo de Convergència i Unió (CiU) realizara sondeos "con finalidades políticas" y financiados con fondos públicos, como los encargados sobre Maragall cuando era alcalde de Barcelona. "Es insólito que, de una forma tan evidente, se realizaran estudios con finalidades políticas con un objetivo concreto, fundamentado en la voluntad de continuidad de un Gobierno y la posibilidad de liquidación de otros", afirmó Nadal en Bruselas.

El consejero explicó que el Gobierno tripartito ya ha encontrado una "larga nómina" de sondeos realizados desde 1983 hasta 2003 "con diversas finalidades" y no descartó que en el futuro "puedan salir más". Treinta de estos estudios deberían haber sido transmitidos por ley al Parlament y no se hizo, denunció. Del resto "podría decirse que cumplen los requisitos de la legislación de la época, pero no deja de ser sorprendente el tipo de estudios, el tipo de consultas, el tipo de preguntas, en un terreno de opinión muy personal", agregó.

Más información
El Gobierno de Pujol encargó un estudio para crear centros de "irradiación" nacionalista

Por su parte, el presidente del Partido Popular en Cataluña, Josep Piqué, expresó ayer su sospecha de que la polémica por estas encuestas es una "venganza" del tripartito contra el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el presidente de CiU, Artur Mas, por pactar el nuevo Estatuto.

"No es casual que surjan estas cosas ahora. Es tal la irritación en el tripartito contra el señor Mas y el señor Zapatero, que me suena todo a venganza", declaró Piqué en una entrevista a Antena 3.

Piqué dijo que no le extrañaba que CiU encargara este tipo de estudios porque "la mentalidad nacionalista lleva al intervencionismo sobre lo social y los medios".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Periodistas "al dictado"

Xavier Trias, presidente del grupo municipal de CiU en el Ayuntamiento de Barcelona y consejero de Presidencia cuando se encargaron algunos de estos estudios, acusó a la "federación socialista de Barcelona y algunos diarios" de una campaña de desprestigio. "Esta polémica tiene detrás el nombre de Joan Ferran, presidente de la Federación Socialista de Barcelona, y también de diarios a los que pido que, aunque escriban al dictado de la federación socialista, sean rigurosos y no digan mentiras", afirmó Trias.

Ferran le respondió de inmediato y acusó a Trias de haber aprobado una legislación que, si bien en principio debía aportar "transparencia, en realidad le permitió esconder los sondeos cuya publicación no interesaba".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_