Moratinos promueve un impulso político para la negociación UE-Mercosur

La reunión de Mercosur en la que participó ayer el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, concluyó sin más resultado que el compromiso de los reunidos de "seguir trabajando en estrecha coordinación para conseguir que, con ocasión de la Cumbre de Viena, se produzcan avances sustanciales" en las negociaciones entre la Unión Europea y la organización regional citada, que integra a Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay y Venezuela.

Queda, pues, lejos el objetivo de que la cumbre Unión Europea-América Latina, que se celebrará en la capital austriaca el próximo mayo, llegue a formular un nuevo calendario para cerrar el acuerdo de asociación bloqueado desde hace dos años por el rechazo que los subsidios agrícolas comunitarios provoca en los latinoamericanos.

Sólo tres ministros, los de Argentina, España y Paraguay, participaron finalmente en este encuentro, al que también concurrió el viceministro portugués de Asuntos Europeos. Moratinos hizo anoche una escala en Brasilia, para seguir tratando el tema con su colega brasileño, Celso Amorim.

Los reunidos en Buenos Aires se comprometieron a "asegurar una elevada participación política" en la Cumbre de Viena, con vistas a lograr "resultados concretos". Trataron, además, otros temas internacionales, como el proceso de paz en Oriente Medio y la crisis ocasionada por las viñetas de Mahoma. El ministro de Exteriores argentino, Jorge Taiana, reiteró ayer, en ese contexto, que su país participará en la Alianza de Civilizaciones impulsada en la ONU por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero.

Moratinos informó, por su parte, de que también se había interesado por la alianza la secretaria de Estado de EE UU, Condoleezza Rice, quien le telefoneó el lunes para recabar su solidaridad con una ONG que está siendo perseguida en Venezuela por haber recibido financiación estadounidense.

En relación con el conflicto desatado entre Argentina y Uruguay por el proyecto de este segundo país de construir una papelera en territorio fronterizo, Moratinos reiteró que no se plantea una mediación, "ni siquiera buenos oficios". Jorge Taiana dijo que el problema, en el que está implicada una empresa española que aspira a construir la planta de pasta base, no fue abordado con Moratinos ni por él ni por el presidente argentino, Néstor Kirchner.

La visita del ministro español no ha producido, en cualquier caso, resultados en este campo, ya que el diálogo entre los dos países enzarzados sigue interrumpido.