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Salud promete que la espera para una prueba diagnóstica no superará los 90 días

Salud controlará otras operaciones para fijar un tiempo máximo para las intervenciones

Ana Pantaleoni

Un total de 180.281 personas están en Cataluña a la espera de someterse a una prueba diagnóstica ambulatoria como una mamografía, una resonancia magnética o una colonoscopia. La media para ser atendido son 139 días, a excepción de pruebas de seguimiento, urgencias o sospecha de cáncer, caso que se resuelve en un máximo de 30 días.

La Generalitat anunció ayer que está dispuesta a rebajar el tiempo mediante la aprobación de un decreto y la inversión de ocho millones de euros en 2006 para incrementar la actividad hospitalaria. El compromiso es que a partir de finales de este año los pacientes de la red de salud pública esperen como mucho 90 días para realizar una de estas 12 pruebas. La excepción está en los estudios del sueño (polisomnograma), con un tiempo de espera máximo de 120 días para finales de 2006, de acuerdo con el compromiso de Salud.

Además del sueño (ahora, 271 días), las pruebas que registran más colas son las mamografías de carácter no urgente (222 días), los electromiogramas (179) y las ecografías abdominal y urológica (178 días). El Foro Español de Pacientes consideró positiva esta nueva medida. Sin embargo, la consejera de Salud, Marina Geli, admitió que, debido al desequilibrio territorial, el tiempo de espera máximo de tres meses será más difícil de garantizar, en algunas pruebas, en las comarcas de los Pirineos y del Ebro. Geli explicó que se han escogido las pruebas más frecuentes para fijar este tiempo de garantía, como se hizo en su momento con las intervenciones quirúrgicas.

La consejera presentó ayer el balance de las listas de espera en los últimos dos años, de 2003 a 2005. El aumento de actividad quirúrgica en un 10% ha permitido rebajar en un 11,8% las listas de espera para operarse en este periodo, anunció la consejera. A finales del año pasado 58.700 personas aguardaban en Cataluña para ser operadas frente a las 66.567 que lo hacían en el mismo mes de 2003. El tiempo de espera pasó de 5,6 a 4,5 meses. Geli destacó el aumento en operaciones de prótesis de rodilla, juanetes y cataratas.La reducción del tiempo de espera ha sido especialmente acusada en las prótesis de rodilla, una de las asignaturas pendientes ya que registra una mayor demanda. Esta intervención se incluye entre las 13 que tienen fijado un plazo máximo de espera de seis meses y es la única, junto a los juanetes, que supera el límite.

En 2005 se realizaron 9.915 intervenciones de prótesis de rodilla. Pese a la reducción lograda, todavía hay que esperar de media 8,19 meses para operarse. Un ejemplo: el plazo para ser intervenido de prótesis de rodilla en el hospital de la Santa Creu y Sant Pau es de 11,72 meses.

Goyi Díaz se operó de prótesis de rodilla en noviembre. Esperó durante dos años, y fue por un motivo: quería que le operara el médico que le intervino la otra rodilla hace ahora 17 años. "Quise esperar porque podía aguantar; sin embargo, una amiga mía que también estaba en cola prefirió cambiar de cirujano y en pocas semanas la operaron", explica Díaz, miembro de la Liga Reumatológica catalana.

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Albert Novell, presidente del Foro Español de Pacientes, cree que la clave se encuentra en informar adecuadamente al paciente durante ese tiempo de espera. "El gran problema de esa espera son los costes intangibles como la angustia", explica Jovell, quien reconoce que ajustar la oferta a la demanda en este tipo de intervenciones quirúrgicas como las prótesis y las cataratas es complicado. "Hay que contar con que asumimos pacientes de otras comunidades autónomas que pesan en nuestra lista de espera", añade Jovell.

Miquel Bruguera, presidente del Colegio de Médicos de Barcelona, explica esta mejora a la ampliación de actividad. "Muchas de estas reducciones se han hecho ampliando el horario de médicos que se han ofrecido voluntariamente gracias a una mejora retributiva", afirmó. En 2004 el departamento invirtió 10,7 millones de euros en actividad quirúrgica.

Obesidad mórbida

Otra novedad que anunció ayer la consejera para este año es la monitorización de 14 nuevos procedimientos quirúrgicos, entre ellos las operaciones de oído medio e interno, extracción quirúrgica de dientes, reparación de hernias y cirugía por patología del disco intervertebral. De ellas, Geli destacó las relacionadas con la columna vertebral y la obesidad mórbida.

En 2005 se intervinieron en Cataluña 500 personas por esta enfermedad, pero ahora ya hay 859 pacientes en cola para un tratamiento contra la obesidad mórbida. El tiempo medio de espera son 17 meses.

El Departamento de Salud prevé un aumento de esta patología en los próximos tiempos y por este motivo está entre las enfermedades que controlar; además, se añade una mayor complejidad a la hora de abordarla porque requiere un tratamiento multidisciplinar. Geli avanzó la puesta en marcha de una unidad especializada de cirugía ortopédica vertebral compleja en el hospital Vall d'Hebron y un incremento de la compra de procedimientos quirúrgicos para el trato de la obesidad mórbida.

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Sobre la firma

Ana Pantaleoni
Redactora jefa de EL PAÍS en Barcelona y responsable de la edición en catalán del diario. Ha escrito sobre salud, gastronomía, moda y tecnología y trabajó durante una década en el suplemento tecnológico Ciberpaís. Licenciada en Humanidades, máster de EL PAÍS, PDD en la escuela de negocios Iese y profesora de periodismo en la Pompeu Fabra.

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