Bruselas convoca una reunión urgente de expertos para analizar el conflicto

El comisario europeo para la Energía, Andris Pielbag, convocó ayer una reunión urgente del Grupo de Coordinación del Gas para el 4 de enero en Bruselas, por temor a que la disputa entre Rusia y Ucrania pudiera afectar el suministro de gas en Europa, según fuentes de la Comisión Europea.

La Comisión, que sigue de cerca las conversaciones entre ambos países, ha mostrado su "inquietud" por el desarrollo de las mismas y sus efectos en los suministros de gas. Bruselas señala, no obstante, en un comunicado que "confía en que un acuerdo podrá ser alcanzado entre las partes y que ambos países, Rusia y Ucrania, harán honor a sus compromisos de suministro en los mercados de gas como han hecho hasta ahora".

Las negociaciones se desarrollan entre la compañía rusa Gazprom, una sociedad privada aunque con participación del Estado, propietaria del gas; y Naftogaz, empresa estatal de Ucrania, que interviene en el transporte del combustible por este país. El gas procedente de Rusia supone el 32,7% de las importaciones europeas, aunque no todas pasan por Ucrania.

Fuentes de la Comisión indican que en el supuesto de que una limitada cantidad de suministros fuera interrumpida, confían en que no se produciría una situación de escasez de gas a corto plazo, dado el nivel de reservas y suministros existentes de otras áreas.