El Gobierno canario pide explicaciones sobre vuelos de la CIA en Tenerife
Los aviones investigados en Palma de Mallorca también aterrizaron cuatro veces en Canarias
Los vuelos investigados por la Guardia Civil en Palma de Mallorca, supuestamente utilizados por la CIA para el traslado de presos relacionados con el terrorismo de origen islamista, también hicieron escala al menos una vez en Ibiza y en cuatro ocasiones en el aeropuerto Reina Sofía de Tenerife, según los datos confirmados por las autoridades aeroportuarias. El Ejecutivo canario aseguró ayer que exigirá una explicación al Gobierno central sobre estas escalas, según declaró el portavoz del Gabinete autonómico, Miguel Becerra (de Coalición Canaria).
El pasado 7 de abril, el portavoz del Grupo Parlamentario de Coalición Canaria en el Congreso, Paulino Rivero, preguntó al ministro del Interior, José Antonio Alonso, si conocía estas escalas. "No se tiene conocimiento de que Canarias haya sido empleada como escala en el transporte ilegal de personas, supuestamente terroristas, por ningún país", según la explicación remitida a los nacionalistas desde Interior. El documento añade: "Estas actividades están declaradas ilegales en nuestro ordenamiento y por tanto las autoridades españolas no aceptan que se desarrolle en su territorio, con independencia de la persona afectada".
Miguel Becerra añadió ayer que, mientras se producía esta respuesta por parte de Interior "el CNI conocía" estas prácticas. "Es una muestra más de la ceguera informativa a que nos somete Madrid respecto a las cuestiones de seguridad que ocurren en nuestro territorio, hasta el punto de que nos tengamos que enterar por la prensa", señaló.
Los aviones supuestamente utilizados por la CIA que hicieron escala en Palma de Mallorca y fueron investigados por la Guardia Civil también aterrizaron en alguno de los dos aeropuertos de la isla de Tenerife en cinco ocasiones entre marzo de 2004 y mayo de este año, según la información publicada por La Opinión de Tenerife. Los datos de AENA facilitados a este medio indican que en 2004 se registraron al menos cinco aterrizajes de aparatos Gulfstream de 15 plazas de capacidad, de los que se desconoce el listado de pasajeros, y que el avión estuvo en pista menos de 20 horas. Según indica el plan de vuelo, en dos ocasiones los aparatos se dirigían a Rabat, otras dos veces regresaron de la capital marroquí a la ciudad de Washington.
Por otra parte, el fiscal jefe de Baleares aseguró ayer que los aviones supuestamente utilizados por agentes de la CIA para el traslado de detenidos por terrorismo internacional que hicieron al menos diez escalas en Palma de Mallorca "eran absolutamente normales" y "en su interior no se vio nada extraño ni sospechoso", según explicó ayer el fiscal jefe de Baleares, Bartolomé Barceló, con base en los interrogatorios que él efectuó a los encargados de las empresas de mantenimiento que penetraron en dichas aeronaves.
El fiscal negó, por otra parte, que haya pedido el archivo de las diligencias abiertas en un juzgado de Palma, a raíz de una denuncia de un colectivo de ciudadanos de Mallorca, sino que ha recurrido en reforma el auto de inhibición del juez de instrucción a favor de la Audiencia Nacional, para que especifique qué supuestos delitos indaga, los posibles autores y sus víctimas.
Con esta acción Barceló quiere mostrar su disposición a impulsar "alguna vía" en una nueva investigación, si se sustancia una acusación particular en la causa que él "apoyaría". El juez ha impuesto una fianza de 2.000 euros al grupo de denunciantes, que ha solicitado un aplazamiento en el pago y ratificó ayer su disposición a personarse ante la Audiencia Nacional.
Barceló compareció ante la prensa para aclarar la posición del ministerio público sobre este asunto, reiteró que su investigación inicial de marzo de 2005, fue "exhaustiva" sobre "tripulantes, pasajeros de los aviones y los hoteles donde se alojaron" encargada a la Guardia Civil, pero que llegó "a un punto muerto", "se agotó" y quedó archivada. Posteriormente, el grupo de ciudadanos denunció los hechos ante el juez quien reclamó a la fiscalía el informe del instituto armado. A principios de octubre, el instructor decidió inhibirse en favor de un juzgado central de Instrucción de la Audiencia Nacional, por cuestiones de territorialidad de la presunta causa penal, una inhibición que recurrió Barceló. Así, el asunto sigue aún en Palma.
Barceló indicó que las investigaciones sobre aviones de un país extranjero "es un tema complicado", por cuestiones de "territorialidad". Para él, sólo un juez en caso de peligro para la vida de una persona o con conocimiento de la comisión de delitos flagrantes contra personas podría reclamar la acción en el interior de una aeronave extranjera.
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