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Reportaje:

El arte que deslumbró al Quijote

90 obras de El Greco, Ribera o Zurbarán ilustran la época en que Cervantes escribió la novela

Amelia Castilla

La exposición El arte en la España del Quijote acerca la novela al momento artístico en que Cervantes escribió la obra, representado en la tensión entre la corriente idealista y la realista. La muestra, inaugurada ayer por la tarde en el convento de la Merced de Ciudad Real por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega; el presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, y el presidente del Congreso y diputado por Ciudad Real, Manuel Marín, reúne 90 obras, entre pinturas, esculturas y grabados de El Greco, Ribera o Zurbarán, y estará abierta hasta el 26 de febrero. Con la exposición se inauguraba también el rehabilitado convento de la Merced convertido ya en una ampliación del Museo Provincial.

La exposición se abre y se cierra con obras de El Greco: 'La Sagrada Familia' y 'La Santa Faz'

Javier Portús, historiador del Arte, conservador de pintura del Barroco del Museo del Prado y comisario de la muestra, no se planteó la exposición inaugurada ayer como una mera selección de obras de la época. Durante meses buscó un discurso que no obligara a depender de obras concretas. "No pretendíamos encontrar imágenes que ilustraran el Quijote pero sí los problemas y los temas que aparecen en el libro de Cervantes. Se trata de una obra única, escrita en un momento determinado y en ese contexto hemos situado la exposición", aseguró ayer el comisario poco antes de la llegada de las autoridades al convento de la Merced, donde hasta el último momento los operarios daban los últimos retoques al edificio.

Uno de los hilos argumentales de la muestra relaciona la obra de Cervantes con la de El Greco. Con frecuencia, aclara el comisario, se tiende a identificar a Cervantes con Velázquez pero su coetáneo fue El Greco, motivo por el que se han escogido dos de las obras más importantes de su trayectoria artística para el arranque y el punto final. Velázquez empezó a pintar cuando Cervantes ya había fallecido y La natividad, una de las cinco obras de El Greco expuestas, procedente del Hospital de la Caridad de Illescas, se pintó en el mismo momento en el que se escribía la novela.

El arte en la España del Quijote se abre y se cierra con las obras de El Greco: La Sagrada Familia y La Santa Faz. Esta última puede definirse como una pintura sobre la pintura y en este caso ser comparada con el Quijote, una novela sobre la novela. La confrontación entre el idealismo y el realismo que encarnaban el caballero y su fiel escudero se puede aplicar también a la pintura de la época, representada en el manierismo y en el nacimiento del movimiento artístico que reivindica la realidad.

La Sagrada Familia, la obra que abre la muestra, está representada en el antiguo convento de la Merced por tres pintores que representan tres lenguajes distintos: el manierismo de El Greco, el clasicismo de Carducho y el naturalismo de Ribera. Más de una treintena de instituciones públicas y privadas han prestado obras para la muestra, patrocinada por el Gobierno de Castilla-La Mancha en colaboración con la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales (SECC). El arte en la España del Quijote reúne 90 obras entre esculturas, dibujos, pinturas y grabados y está dividida en cuatro partes que recorren los fenómenos artísticos de la época: Los lenguajes pictóricos, Nuevos géneros y técnicas, La narración y Las artes reflexionan sobre sí mismas.

"No se trataba de hacer una antología de lo que ocurría en el arte español entre 1590 y 1630, sino que están representados los artistas más representativos de la época que trabajaron en España en los años en que se publicaron las dos partes del Quijote", añade Portús. En esa época algunos temas pictóricos alcanzaron la categoría de géneros, como el bodegón, pero fue el tiempo también en que el retrato comenzó a extenderse a un número cada vez mayor de sectores sociales y el momento en que se desarrollaron las técnicas del grabado calcográfico. En paralelo, recalca Portús, se producía el triunfo definitivo de la novela como género de carácter masivo. La parte de la muestra dedicada a La narración reúne escenas bíblicas e imágenes de penitentes que muestran también los términos en que se concebía el paisaje y permiten su comparación tanto con el paisaje de la novela de Cervantes como con algunos de los personajes que pueblan el Quijote. El montaje concluye con el apartado dedicado a la reflexión que las artes hicieron sobre sí mismas, en un momento excepcional en las artes plásticas españolas. "El interés que muestra Cervantes en el Quijote por reflexionar sobre su propia novela y sobre la literatura en general, fue compartido por muchos artistas de la época", concluye.

Entre las obras expuestas destacan Taller de Nazareth, de Ribera; Santa Isabel de Turingia, de Zurbarán; Antonio de Covarrubias, de El Greco, o Cabeza del Bautista, de Juan de Mesa. También figuran Virgen despertando al Niño, de Juan Sánchez Cotán; Sagrada familia, de José de Ribera y taller; Santa Isabel de Turingia, de Francisco Zurbarán; Cabeza del Bautista, de Juan de Mesa; Caballero anciano, de Luis Tristán; Bodegón, de Felipe Ramírez; San Jerónimo, de Juan Martínez Montañés;

Con El arte en la España del Quijote se inauguró también como museo el rehabilitado convento de la Merced. El edificio, fundado en tiempos de Felipe II, se utilizó primero como convento de los mercedarios descalzos y posteriormente como instituto de segunda enseñanza desde 1843 a 1995. Suelos de piedra pulida, paredes en tono vainilla y vigas de madera al descubierto albergarán hasta el 26 de febrero la muestra, relacionada con el arte del Quijote pero el edificio pasará a formar parte del Museo Provincial de Ciudad Real.

La muestra se enmarca dentro de los actos -más de 2.500 actividades culturales a lo largo de 2005- que conmemoran el cuarto centenario de la novela de Cervantes y coincide con una exposición en el Rectorado de Ciudad Real que recoge 123 ejemplares del libro de Cervantes que proceden de 27 bibliotecas de diferentes ciudades del mundo. Desde el Gobierno regional se están desarrollando planes de fomento de la lectura, congresos y espectáculos de teatro.

En el marco de los actos del IV centenario, la pasada semana se inició en Madrid -con las intervenciones de José Antonio Pascual y Manuel Fernández Álvarez- el ciclo de conferencias que coordina Antonio Bonet Correa para el Instituto de España, y en el que participarán el propio Bonet Correa (el próximo martes), Carmelo Lisón (el jueves), Luis Sánchez Granjel (día 15), Ángel Sánchez de la Torre (día 16), María del Carmen Francés (día 17) y Francisco Ynduráin (día 18).

El cuadro <i>Bodegón con cardo...</i>(1628), de Felipe Ramírez, que forma parte de la exposición.
El cuadro Bodegón con cardo...(1628), de Felipe Ramírez, que forma parte de la exposición.
María Teresa Fernández de la Vega y José María Barreda, ante <i>San Jerónimo,</i> de Montañés.
María Teresa Fernández de la Vega y José María Barreda, ante San Jerónimo, de Montañés.EFE
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