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Una promoción estatal frente al patrimonio

"En Cultura estamos muy preocupados con todas las intervenciones en lugares declarados Bien de Interés Cultural (BIC) y aquellos que generan un impacto negativo", declara el director general de Bellas Artes, del Ministerio de Cultura, Julián Martínez. Sobre la construcción del parador en el castillo de Lorca, un proyecto estatal de Paradores de Turismo de España, sociedad anónima de capital público desde 1991, vinculada a Turespaña, organismo autónomo dependiente del Ministerio de Industria, le llegan cartas de protesta de asociaciones de defensa del patrimonio, como la Plataforma de Lorca, Foro Ciudadano de Murcia e Hispania Nostra, para que Cultura detenga el "expolio", según el artículo 4 de la ley de Patrimonio Histórico Español de 1985. Paradores de Turismo de España (www.parador.es) anuncia que el de Lorca tiene prevista su apertura a finales de 2006.

Cultura ha pedido informes el pasado 11 de marzo a los promotores y organismos que han autorizado el proyecto, como Turespaña, la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia (que tiene la competencia) y el Ayuntamiento de Lorca, y ante la falta de respuesta de la comunidad se ha insistido para poder evaluar la situación. No se descarta que se lleve el caso a una próxima reunión del Consejo del Patrimonio (en el que participan las comunidades y ciudades autónomas), ya que la alerta se extiende a otros futuros proyectos de paradores en lugares protegidos, como los de Ibiza y Morella (Castellón).

"Atentado"

De "atentado arqueológico y paisajístico en Lorca" lo califica Hispania Nostra (www.hispanianostra.es), asociación vinculada a Europa Nostra, dedicada a la defensa y promoción del patrimonio cultural y su entorno. "Paradores es un agente destructor del patrimonio español", afirma Alfredo Pérez de Armiñán, jurista y presidente de Hispania Nostra, cuya junta directiva aprobó el pasado 16 de junio apoyar al Foro Ciudadano de Murcia en "la paralización inmediata" de las obras.

"El empleo de fondos públicos, con la intervención decisiva del sector público estatal, en un caso como el presente, en el que se destruye en buena parte un valioso bien integrante del patrimonio histórico español, exige indudablemente la actuación de la Dirección General de Bellas Artes en defensa del patrimonio", dice Pérez de Armiñán en una carta enviada a Julián Martínez, que no ha tenido respuesta.

"Paradores de Turismo viene actuando desde hace años de una forma absolutamente autónoma y sin control efectivo de sus proyectos por la Administración, ni en el Estado ni en las comunidades autónomas", añade Pérez de Armiñán. "Es una sociedad mercantil que actúa como si fuera un particular, y la culpa la tienen las tres administraciones". La obra de Lorca afecta a la arqueología y al perfil de la ciudad. El proyecto es de los arquitectos de Turespaña Carlos Rodríguez Martín y Carlos Fernández Cuenca, para quien "el edificio tiene una línea muy discreta y no se impone".

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