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Los pescadores consideran "insostenible" su situación por la carestía del gasóleo

El precio del combustible ha subido un 130% en 22 meses mientras el del pescado baja

Tomaron la decisión por la noche y la pusieron en marcha ya entrado el día. Los pescadores de bajura del País Vasco bloquearon ayer los puertos de Pasajes y Bilbao para protestar por la subida del precio del gasóleo y lograron alterar la actividad comercial en el Abra. Alrededor de una veintena de barcos se quedaron sin poder realizar sus operaciones de carga y descarga en el muelle vizcaíno. "La situación es insostenible", aseguró ayer el presidente de la Federación de Cofradías de Guipúzcoa, Jaime Tejedor. Si el Gobierno central no toma de inmediato cartas en el asunto, advirtió, el bloqueo podría extenderse a todo el Cantábrico.

Apenas eran las diez de la mañana cuando la Federación de Cofradías de Pescadores de Guipúzcoa anunciaba en rueda de prensa que la flota de bajura de este territorio había decidido sumarse a las protestas de sus colegas españoles para forzar al Gobierno socialista a negociar ayudas económicas al sector. Su fórmula es la misma que ya están empleando en el Mediterráneo y está causando incidentes, perjudicando a miles de viajeros y dejando desabastecidas las lonjas de pescado y los mercados: un bloqueo en los puertos de mayor actividad comercial. En el caso de Euskadi, los de Pasajes y Bilbao.

"Esto ya es insoportable. No hay economía que pueda soportarlo", sostuvo Tejedor para justificar la medida de protesta, que continuaba a primera hora de la noche de ayer. "En 22 meses, el precio del combustible ha subido el 130% y encima el pescado se vende más barato", agregó. Los datos que ofrece son elocuentes: en enero de 2004, un barco podía gastar en nueve meses unos 40.000 euros de media en combustible. Para octubre de ese año, cuando el sector y el Ejecutivo central firmaron un acuerdo de ayudas que, según Tejedor, la Administración no ha cumplido, esa cifra alcanzaba ya los 60.100 euros y ahora se ha disparado hasta los 106.000 euros.

Por ello, se movilizaron ayer más de medio centenar de barcos, porque los bolsillos de sus armadores -que, a diferencia de en el Mediterráneo, son los únicos que asumen las subidas del precio del combustible- se están resintiendo. Su protesta apenas afectó a la actividad del puerto de Pasajes, que el año pasado movió más de cinco millones de toneladas de mercancías. Los buques que tenían que operar ayer en su muelle habían entrado antes de las diez de la mañana, hora en la que una veintena de pesqueros se apostaron en la bocana y en el interior de la bahía. "No ha habido ninguna incidencia", señaló una portavoz de la Autoridad Portuaria de Pasajes. "Los problemas seguramente se darán a partir de mañana".

La flota de bajura vizcaína secundó por la tarde, después de una reunión de los representantes de las cofradías en Bermeo, la movilización que había iniciado la guipuzcoana por la mañana y que ya afectaba a Bilbao. El puerto de la capital vizcaína vio limitado su funcionamiento por la acción de cerca de 40 pesqueros que bloquearon la bocana del Abra e impidieron la entrada y salida de una veintena de barcos con mercancías, según señaló un portavoz de la Autoridad Portuaria bilbaína. Sólo pudo librarse del encierro un buque que transportaba gas, que zarpó antes de las diez de la mañana tras llegar a un acuerdo con los arrantzales, por la peligrosidad de su mercancía.

Ayer fue además una jornada en la que "hubo bastante movimiento de barcos" en el puerto bilbaíno, explicó el mismo portavoz. Las mercancías más afectadas fueron la carga general y los graneles líquidos. La paralización no tuvo efecto en pasajeros, ya que la temporada de cruceros concluyó el pasado 30 de septiembre y el ferry que une Bilbao e Inglaterra y recala en el recinto cada tres días zarpó el martes.

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La situación puede agravarse en el Cantábrico si el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero y el sector no alcanzan un acuerdo. Al cierre de esta edición, aún permanecían reunidos sus representantes en Madrid y también continuaba por tanto el bloqueo. "El Gobierno tiene que mover ficha. Es sordo o ciego o está dando la espalda al sector", había insistido Tejedor horas antes. De lo contrario, advirtió, el bloqueo podría extenderse a todo el Cantábrico esta misma semana. De hecho, los pescadores cántabros decidieron anoche paralizar su actividad desde el día de hoy.

El presidente de la Federación de Cofradías de Pescadores de Guipúzcoa se reunirá hoy en Pasajes con representantes del Senado para discutir la situación.

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