La Fundación Gabarrón premia a Richard Serra, Raúl Rivero y Caballero Bonald

La Fundación Gabarrón entregó ayer los premios que llevan el nombre de este pintor y escultor, nacido en Mulas (Murcia), asentado en Valladolid y que actualmente exhibe una antología de su obra en el Chelsea Art Museum de Nueva York. Los galardones son un reconocimiento a la trayectoria de personas y entidades que se han distinguido a lo largo del año en diferentes campos de la ciencia, la investigación, las letras, el deporte, las artes o las humanidades, entre otras disciplinas. Durante esta cuarta edición se han entregado nueve premios, consistentes en una medalla conmemorativa y una escultura en oro creada expresamente por Cristóbal Gabarrón para este acto.

El primer premio recogido anoche en el escenario del vallisoletano teatro Calderón fue para el escultor norteamericano Richard Serra, que por motivos de salud no pudo estar presente y estuvo representado en la ceremonia por el director del Museo Guggenheim de Bilbao, Juan Ignacio Vidarte. El jurado calificador destacó de Serra su capacidad para "provocar emociones" en el espectador de su amplia obra artística. El premio de las Artes Escénicas fue para la Seminci, la Semana Internacional de Cine de Valladolid, que este año cumple su 50 aniversario y que comenzará sus sesiones en un par de semanas. El tercer galardonado fue el cardiólogo barcelonés Valentín Fuster, a quien el jurado quiso reconocer su aportación "a la medicina cardiovascular, que ha tenido un gran impacto en la mejora del tratamiento en pacientes con dolencias cardiacas".

El premio 2005 al Mejor Deportista fue para el montañero alavés Juanito Oiarzábal, por su "ansia de superar los retos frente a la naturaleza y el trabajo en equipo como muestra de la solidaridad", mientras que el de Economía, otorgado por primera vez este año, recayó en el catedrático Enrique Fuentes Quintana, en reconocimiento a "su aportación indiscutible al establecimiento de las bases del Estado del bienestar", según el acta del jurado que otorgó el mismo. El siguiente en subir al escenario fue el escritor y ensayista José Manuel Caballero Bonald, distinguido con el premio de las Letras, por "su permanente compromiso ético", por su capacidad creativa y "la decencia de su mensaje", mientras que el de Pensamiento y Humanidades fue a parar a manos del poeta cubano Raúl Rivero, calificado como un "símbolo" de la libertad de expresión, que ha merecido numerosos galardones en todo el mundo. La conservadora de arte italiana Pinnin Brambilla, experta en la restauración de frescos, pinturas y tablas de los más sobresalientes pintores italianos, fue distinguida con el octavo galardón de la noche, mientras que el premio a una Trayectoria Humana fue para el prestigioso jurista Eduardo García de Enterría, calificado como garante "de los derechos fundamentales del ciudadano ante las Administraciones Públicas".