Los sindicatos valoran el pacto, pero piden un plan definitivo

Los dos sindicatos mayoritarios, UGT y Comisiones Obreras, coincidieron ayer en valorar el acuerdo alcanzado por el Gobierno y las autonomías, pero recalcaron que ahora debe buscarse una solución definitiva a la financiación de un servicio público tan esencial como la sanidad.

El secretario general de UGT, Manuel Pastrana, afirma que el acuerdo es "un paso muy importante" y que ahora el objetivo es encontrar una fórmula que dé "estabilidad" al sistema público de salud. La misma opinión tiene el secretario general de Comisiones Obreras, Francisco Carbonero, quien afirma que se trata de un "modelo provisional que debe ser revisado a fondo" para dotarlo de "estabilidad".

Pastrana y Carbonero recalcaron la importancia de que la mejora se produzca, principalmente, mediante la aportación presupuestaria realizada por el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, en vez de a través de la subida de los impuestos indirectos. El Gobierno va a aportar 1.677 millones de euros al sistema, de los que sólo 277 millones proceden de la subida de los impuestos sobre el alcohol y el tabaco.

Los impuestos indirectos, destaca Pastrana, "son discriminatorios", por lo que se ha avanzado "en la línea correcta". De igual manera opina Carbonero, quien rechaza la subida de los impuestos indirectos y aboga por que las autonomías hagan uso del margen que tienen para subir el IRPF con el fin de sufragar el gasto sanitario.