La Generalitat comprará suelo en Marruecos para facilitar la implantación de industrias

El director general de Industria y Comercio, José Miguel Salavert, anunció ayer que la Generalitat tiene previsto adquirir suelo en Marruecos con el fin de facilitar la implantación de industrias en el país vecino. Salavert quiso aclarar que la intención no es la de promover la deslocalización ni la de descapitalizar la Comunidad Valenciana, sino la de impulsar nuevas oportunidades de negocio y de mercado con la creación de industrias complementarias a las existentes en la Comunidad Valenciana. Para ello, Industria pondrá en marcha en septiembre una serie de oficinas mixtas, en colaboración con el Gobierno de Marruecos, a través de las que se canalizará la información que los empresarios precisen para analizar su posible implantación en aquel país. Además, el Gobierno marroquí se ha comprometido a facilitar, en la medida de lo posible, los trámites burocráticos para acelerar la llegada de las inversiones.

La Consejera del Ministro de Industria, Comercio y Modernización de la Economía de Marruecos, Houda Benghazi, explicó claramente que las ventajas que ofrece su país se centran en la existencia de una mano de obra más barata y la posibilidad de utilizar el país como plataforma de lanzamiento y apertura de nuevos mercados ya que, por ejemplo, Marruecos tiene un tratado de libre comercio con Estados Unidos que entrará en vigor en 2006. "Tenemos lo que la Comunidad Valenciana no puede ofrecer para posicionarse, llegar a nuevos mercados y ser competitivos", señaló Benghazi.

Dado que las oficinas ya están en funcionamiento, de manera provisional, las administraciones ya han comenzado a facilitar información pese a que será en septiembre cuando se firme el convenio de colaboración.

Por otra parte, Houda Benghazi, aseguró que su gobierno sólo inspeccionará una partida de cada productor cerámico procedente de España que llegue a la aduana de su país. Con esta medida, el gobierno marroquí pretende dar muestras de que el bloqueo de la entrada de azulejos por su frontera no ha sido una medida de proteccionismo frente a los productores españoles sino frente a la competencia del "monstruo China", tal como dijo Benghazi. Esta decisión es sólo temporal, hasta que ambos gobiernos determinen qué laboratorios certifican la calidad que exige Marruecos para las importaciones azulejeras.