"El problema de fondo es la masificación de la sanidad"
"El problema de fondo del caso Leganés es la saturación del sistema sanitario. Los médicos estamos pagando el pato de la masificación", dice José Ramón González Escalada, jefe de la Unidad del Dolor del hospital Ramón y Cajal de Madrid, que tiene seis camas. González Escalada, de 58 años, es madrileño y especialista en Medicina Interna.
Pregunta. ¿Cuál es el problema de fondo en Leganés?
Respuesta. La saturación del sistema sanitario. Los médicos estamos viendo más enfermos de los que podemos atender, estamos pagando el pato de la masificación. Los pacientes los primeros, claro, pero también nosotros.
P. ¿Se puede sedar en Urgencias?
R. No es un sitio idóneo. Se seda para evitar el sufrimiento, y muchas veces ese sufrimiento es psíquico. Yo pongo el ejemplo de un enfermo de cáncer de pulmón que tose y sangra. Su problema no es el dolor, es la angustia que siente, y el ahogo. Hay que sedarle para aliviarle y no puede estar en un pasillo. Además, Urgencias es un lugar de paso. Un paciente sedado puede estar en esa situación horas, días e incluso semanas.
P. ¿Dónde hay que hacerlo?
R. En un lugar digno, con espacio para la familia, que tiene que acompañar al paciente y despedirse de él.
P. ¿Qué ha ocurrido entonces en Leganés?
R. Desde luego, la culpa no la tiene el médico que seda, sino quien tiene la idea de crear camas en Urgencias para enfermos terminales.
P. Parece que fue una iniciativa de la dirección médica y del coordinador de Urgencias.
R. Supongo que lo harían por tensión. Si un director médico ve que los pacientes mueren en los pasillos, se plantearía hacer algo, pero organizar una unidad de paliativos en Urgencias no es la solución.
P. ¿Qué opinan los médicos del caso Leganés?
R. Hay indignación por el manejo. Nuestro prestigio está tocado. Estamos atrapados en medio de una guerra política y mediática.
P. ¿Qué le parece la actuación de la Comunidad?
R. Ha tomado medidas demasiado rápidas y poco pensadas. El asunto debería haberse quedado en los colegios de médicos, que tienen un comité deontológico.
P. ¿Y la solución?
R. La tienen en sus manos las administraciones sanitarias. Primero, potenciar los cuidados paliativos a domicilio. Pero es comprensible que la familia, al ver al paciente empeorar, se angustie y acuda a Urgencias. Pero desde ahí hay que ingresarle en una unidad adecuada.
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