_
_
_
_
Elecciones en el PaísVasco

Ibarretxe acusa al PP y al PSE de no tener proyecto y de no creer en Euskadi

María San Gil y Patxi López achacan al 'lehendakari' haber pactado con los terroristas

El debate entre los cuatro candidatos a lehendakari, emitido anoche por la televisión pública vasca (ETB), no deparó sorpresas. Juan José Ibarretxe volvió a presentar a socialistas y populares como un viaje hacia el pasado y sin proyecto. Los aspirantes del PNV-EA, PP y EB aprovecharon el flanco abierto por la indefinición del socialista Patxi López sobre los posibles pactos poselectorales. María San Gil, del PP, acusó al candidato de la coalición nacionalista "haber pactado con ETA" y López le reprochó haber abandonado a las víctimas del terrorismo. Javier Madrazo (EB) invitó al PSE a unirse al tripartito.

Más información
Otegi: "Un paso más en unas elecciones antidemocráticas"
López promete transporte gratis a jóvenes y mayores con rentas menores de 1.026 euros
Madrazo define al PCTV como la nueva marca de Batasuna
El PP atribuye la mejora de la economía vasca a la gestión de Aznar
Primeras dudas sobre la mayoría absoluta de Ibarretxe
Aralar denuncia ataques del entorno de ETA contra sus sedes
BLOC DE CAMPAÑA
La decisión sobre el futuro de Euskadi
El Gobierno no ve aún base para impugnar la lista sospechosa, pero Bono quiere actuar ya
"No existen indicios de contactos con Batasuna o el entorno terrorista"

No fue un debate a tres, pero lo pareció. Los candidatos se hicieron preguntas directas e incisivas, básicamente en la misma dirección: los aspirantes del PP y del PSE hacia el candidato a la reelección, Juan José Ibarretxe.

La rigidez del debate afectó a la forma, pero no al contenido. Los bloques dedicados al plan Ibarretxe, el derecho a decidir de los vascos y el referido a la pacificación y el terrorismo de ETA elevaron la temperatura del plató donostiarra de ETB, en Miramón. En cambio, los dedicados a la cultura o la economía fueron una retahíla de cifras deslavazadas que unos se lanzaban a otros, aclarando más bien poco al espectador, o de lugares comunes habituales en el discurso político vasco.

La rígida realización pactada entre los partidos fue a la postre excesiva y forzada. De hecho, en buena parte de las intervenciones, tanto San Gil como López aparecían en la imagen casi todo el tiempo de perfil. Madrazo, por el contrario, casi siempre se dirigía al moderador del debate, el jefe de informativos de ETB, Jaime Otamendi, explicando sus propuestas y entrando en el cuerpo a cuerpo con el resto de candidatos en contadísimas ocasiones.

Una de ellas fue para espetar a Patxi López, en el bloque dedicado al futuro Gobierno y los posibles pactos, su indefinición a la hora de aclarar con quién quería cerrar acuerdos tras el 17-A. Fue el carro crítico al que se sumaron todos. María San Gil no ocultó su desilusión por las frases genéricas y huidizas de López en este asunto. Algo que de alguna manera ella atribuyó al "complejo" de López por no ser nacionalista. "Yo no tengo complejo de no ser nacionalista (...) y ya es hora de que venga una mujer a solucionar este gallinero y el embrollo en el que usted, lehendakari, nos ha metido". Madrazo aprovechó el flanco débil de su adversario socialista para decirle que gobernar con el PP "es legítimo, lo que no es legítimo es no decir a la gente qué es lo que se quiere hacer con sus votos" el 18-A. Y apostó por un Gobierno plural y transversal PNV-EA-EB al que se permitió invitar a sumarse a Patxi López. Ibarretxe, empleando un lenguaje sencillo que no abandonó en ningún momento, planteó el tripartito "para avanzar", frente a la entente PP-PSE, una "vuelta al pasado, para retroceder" y "sin proyecto para este país". "El problema es que ustedes no creen en este país y para dirigirlo hay que creer en él", argumentó. Ibarretxe también mordió el polvo a manos de los candidatos socialista y popular en relación con las víctimas del terrorismo y sus supuestos pactos con ETA. San Gil se hizo fuerte mostrando al candidato de la coalición nacionalista los sellos del PNV junto a los de ETA en el Pacto de Lizarra. "¿Le suena, señor Ibarretxe?", dijo en un tono retador. "Aquí empezó todo, en sus pactos con los terroristas que finalmente aprobaron el plan Ibarretxe en la Cámara vasca". Y le acusó de haber "abandonado" a las víctimas y de pactar con los "verdugos", pasando a la historia como el presidente que tiene "a toda la oposición escoltada". Por su parte, López, que llevaba el pin de una ikurriña en la chaqueta, tuvo un golpe de efecto cuando, sin agotar su tiempo, le pidió a Ibarretxe: "¿Puede usted mirar a la cámara, decir que ha sido el lehendakari de las víctimas, de los amenazados, de los que no son nacionalistas en este país?"

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Mientras, Madrazo desgranaba en cada bloque los frutos de su acción de gobierno al frente de la Consejería de Vivienda y Asuntos Sociales, sin dejarse enredar en lo que en algún momento el candidato Ibarretxe denominó "insultos" y "descalificaciones" de los representantes del PP y de PSE por ligar nacionalismo democrático y terrorismo.

San Gil utilizó un lenguaje directo; Ibarretxe, sencillo; López, sin fisuras y Madrazo, persuasivo. Aunque, como reconoció el propio Ibarretxe, hubo hueco, aunque poco, para el aburrimiento.

Patxi López (PSE-EE), Juan José Ibarretxe (PNV-EA), Jaime Otamendi (moderador), María San Gil (PP) y Javier Madrazo (EB), antes de iniciar el debate.
Patxi López (PSE-EE), Juan José Ibarretxe (PNV-EA), Jaime Otamendi (moderador), María San Gil (PP) y Javier Madrazo (EB), antes de iniciar el debate.ETB

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_