Solana dice que sólo la cooperación puede derrotar al enemigo
Los expertos apuestan por impulsar educación y multilateralismo
"Vivimos en un mundo terriblemente injusto y, mientras esto siga así, seguiremos teniendo problemas de esta naturaleza". El alto representante para la Política Exterior y de Defensa de la Unión Europea, Javier Solana, abordó ayer con rotundidad el siempre presente debate sobre el terrorismo y sus causas o circunstancias concomitantes. "Cooperación" y "multilateralismo eficaz" son las vías, añadió, para derrotarlo.
Solana consideró ineludible que el siglo XXI "afronte seriamente" estos problemas, que resumió en la constatación de que los países ricos son cada vez más ricos y más viejos, desde el punto de vista de la población, mientras los pobres son cada vez más pobres y jóvenes. "Ésta es la reflexión importante".
El futuro ministro de Exteriores de la UE aseguró también que "el terrorismo no será derrotado mediante las armas", sino por iniciativas, entre las que destacó el intercambio de información entre todos los países, sin excluir a ninguno por pequeño que sea, para lo cual es preciso construir un clima de confianza. La lucha antiterrorista, prosiguió, implica una cooperación entre organismos internacionales, de manera que cooperación y multilateralismo eficaz son dos caras de la misma moneda.
Cada problema concreto debe ser planteado, por otra parte, en su contexto regional y hay también que terminar con los conflictos enquistados, como el israelo-palestino, para que no arraigue el veneno intelectual que hace que se multipliquen los terroristas. Solana insistió, en este mismo sentido, en la conveniencia de integrar socialmente a los inmigrantes, a fin de que tengan motivos racionales para rechazar los llamamientos de los fanáticos. Por último, subrayó que el respeto de los derechos humanos y la ley es condición inexcusable de la lucha antiterrorista.
El alto representante hizo estas precisiones en el transcurso de un debate sobre "el camino a seguir", en el que también intervinieron el presidente de Afganistán, Hamid Karzai; el primer ministro de Noruega, Kjell Magne Bondevik; el multimillonario George Soros, y el presidente del Banco Iberoamericano de Desarrollo, Enrique Iglesias. Éste señaló que la lucha contra el subdesarrollo es parte esencial de la solución al terrorismo.
Bondevik insistió más en el aspecto cultural. "Las escuelas tienen que combatir el veneno que propagan los fanáticos", dijo, tras asegurar que "la tolerancia sale del conocimiento". Karzai subrayó que "hay que atacar las causas del terrorismo" y recordó los días en que los afganos advertían al mundo de que los terroristas se concentraban en su país y cómo, hasta el 11-S, nadie les escuchaba.
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