La editorial Suhrkamp publica 'Bambiland', última obra de la autora
La editorial Suhrkamp acaba de poner a la venta un nuevo texto de la premio Nobel de Literatura de este año, Elfriede Jelinek, de 57 años, primero que publica la escritora tras la concesión del galardón el pasado mes de octubre. Se trata de la obra Bambiland, que entrelaza los fantasmas de la violencia y del incesto, de la industria pornográfica y armamentista, es su más reciente obra de teatro. La pieza de Jelinek fue estrenada en el Burgtheater de Viena por el polémico dramaturgo alemán Christoph Schlingesief. En su puesta en escena, el texto original fue completamente transformado y aparece sólo como un borrador.
La autora de Deseo reitera que le gusta dejar entera libertad de interpretación a los artistas que asumen la representación de sus obras sobre un escenario o en cine, como fue el caso de Michael Haneke con La pianista.
La nueva publicación, de 272 páginas, contiene fotografías de la versión de Schingensief, un texto del director sobre la autora, titulado Dinamita innoble, y un ensayo de Bärbel Lücke sobre el filósofo francés fallecido Jacques Derrida, teórico del decontructivismo.
También en el Schauspielhaus de Zúrich se pudo ver el pasado febrero Bambiland, siendo el responsable de su puesta en escena Nicolas Stemann. Esta versión teatral fue tachada de pornográfica y las autoridades suizas restringieron la asistencia al público mayor de 18 años.
'Babel'
Sterman, dramaturgo alemán nacido en 1968 en Hamburgo, uno de los nuevos iconos del teatro germanohablante, se está convirtiendo en especialista de Jelinek. La próxima primavera tiene previsto estrenar en el Burgtheater de Viena su nueva obra, Babel, y actualmente está teniendo mucho éxito con otro drama de la escritora austriaca en el Akademietheater de Viena.
Con el título de La obra, Elfriede Jelinek elaboró un texto en prosa de 160 páginas en el que no hay diálogos ni trama ni personajes. Las figuras que aparecen en el texto recitan largos monólogos. La autora se inspira en una presa de agua en la localidad salzburguesa de Kaprun, la región donde en el año 2000 perdieron la vida más de 150 esquiadores al incendiarse un funicular. Hasta entonces, Kaprun era sinónimo de orgullo nacional, gracias a la presa que comenzó a funcionar en 1955, en la que los austriacos veían un símbolo de la eficiente reconstrucción del país en la posguerra, aunque en realidad fue construida en los años del nazismo por prisioneros en régimen de trabajo forzoso.
Elfriede Jelinek no es la primera galardonada con el Nobel de Literatura que no asiste a la ceremonia de Estocolmo. Entre los ausentes desde 1945, en unos casos se debió a problemas de salud y en otros, como Solzhenitsyn y Sartre, a cuestiones políticas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.